Los autónomos y el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones necesitaron más de medio año para alcanzar un acuerdo sobre el nuevo Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA), basado en la cotización por ingresos reales. Un año después de aquello, las principales asociaciones de autónomos del país no sólo están satisfechas con lo pactado, sino que, además, respaldan la idea de José Luis Escrivá de replicarlo en Europa.

El titular de la Seguridad Social planteará esta cuestión a sus homólogos europeos en la reunión informal de este viernes, celebrada en el Banco de España, en la que intercambiarán experiencias sobre protección social, retos y rentabilidad a medio plazo. Escrivá cuenta con la garantía de que el nuevo RETA recibió el visto bueno de la Comisión Europea, ya que respondía al componente 30 del Plan de Recuperación Transformación y Resiliencia (PRTR). 

El RETA entró en vigor en España a comienzos de este año y se basa en la cotización por ingresos reales. Consta de 15 tramos de cuotas que los autónomos pueden cambiar hasta seis veces al año para adaptar su cotización a las previsiones de ingresos en cada época del año y de su actividad profesional.

Tanto en Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA) como en la Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA) creen que el nuevo modelo español, a pesar de su corta vida, es un buen ejemplo para Europa, como aseguran a EL ESPAÑOL-Invertia.

"Los países europeos observan con envidia el sistema de protección social del RETA. Es un sistema que no existe en Europa", sostiene el presidente de UPTA, Eduardo Abad. El cese por actividad, las bajas o las coberturas en caso de accidente son algunas de las cuestiones que, según Abad, más admiran fuera de España.

Desde ATA, Lorenzo Amor tampoco ve mal que Escrivá comparta esta experiencia con sus homólogos. "España es de los países de Europa con más coberturas de protección social. Por eso, nuestra cuota es más elevada que la de los países con menos protección", apunta a este periódico.

Abad y Amor coinciden en que los países nórdicos son los únicos que superan a España en coberturas para autónomos. No obstante, el presidente de UPTA precisa que sólo en la cuantía pero no en el desarrollo del sistema de protección social.

Mejorar aspectos

La valoración de ambos es que España tiene un buen sistema de protección social para autónomos, aunque para los dos existe margen de mejora.

El presidente de ATA está de acuerdo con que eso ocurra, aunque advierte de que eso deberá hacerse "sin subir cotizaciones". Abad, por su parte, cree que el sistema todavía puede perfeccionarse en las pensiones de jubilación y en las incapacidades totales.

No obstante, en el caso de las jubilaciones, el presidente de UPTA admite que con el nuevo RETA el avance "ha sido brutal" para los trabajadores por cuenta propia.

Abad recuerda que los autónomos perciben pensiones por debajo de la media del resto de cotizantes y, ahora, gracias al nuevo sistema, la pensión más baja está en 1.170 euros.

Protección social digna

Los Estados miembros buscan en este encuentro informal un sistema de protección social para los autónomos, con mejores coberturas en caso de cese de actividad. También miran a futuro y quieren que este nuevo sistema pueda garantizar una protección social digna en la jubilación de los trabajadores por cuenta propia, como apuntan fuentes ministeriales consultadas por EL ESPAÑOL-Invertia. 

El RETA será la inspiración de Escrivá para este semestre y el punto de partida para el Consejo de Empleo, Política Social, Sanidad y Consumidores (Epsco) informal de este viernes. El objetivo es ir definiendo esta cuestión antes del 13 de noviembre, cuando se celebrará una conferencia de alto nivel sobre este asunto, como avanzan desde el Ministerio. La duda para entonces es si será el mismo ministro quien presida, con las elecciones generales a poco más de una semana. 

Aunque España quiere llevar este tema en su agenda, la preocupación por la mejora de la protección social no es nueva. Europa trabaja en este asunto desde 2019 y la Presidencia española quiere ahondar en ello. 

Entre los objetivos que se marca la Seguridad Social para el semestre español también está garantizar el gasto social en un contexto de ajustes fiscales. El Eurogrupo ya ha avisado de que 2024 será el año de apretarse el cinturón, pero España se ha propuesto que Europa siga viendo el gasto social como una inversión. 

España no está sola en esta propuesta y cuenta con el respaldo de Bélgica, país que asumirá la Presidencia en enero.  En la reunión del viernes, ambos países plantearán al resto de Estados que se unan a ellos para encajar el gasto social en los marcos fiscales que se están negociando. La Seguridad Social completa su programa semestral con un impulso a la adecuación de los esquemas de rentas mínimas y un apoyo a la inclusión sociolaboral.