Bruselas

El presidente del Eurogrupo, el socialista holandés Jeroen Dijsselbloem, ha logrado suscitar una rara unanimidad en el Parlamento Europeo. Todos los grupos políticos, desde los conservadores hasta la extrema izquierda, pasando por su propia familia socialista o los euroescépticos, le han reclamado este lunes que dimita. No sólo por sus ataques a los países del sur, a los que acusó de gastarse el dinero "en copas y mujeres", sino también por faltar al respeto a la Eurocámara.

Dijsselbloem había sido invitado a intervenir en un debate sobre el rescate de Grecia que tendrá lugar este martes, pero excusó su presencia alegando problemas de agenda. Es la tercera vez que rechaza una solicitud de comparecencia ante el pleno del Parlamento Europeo. Pero esta vez, su negativa coincide con la polémica suscitada por sus palabras. Desde Portugal e Italia ya se ha pedido su renuncia. El ministro de Economía, Luis de Guindos, no llega tan lejos, pero ha dicho a Cinco Días que el presidente del Eurogrupo "no puede sembrar división". Y asegura que no es candidato a sucederle.

El presidente de la Eurocámara, el conservador Antonio Tajani, ha abierto la veda reprochando a Dijsselbloem su negativa a comparecer ante el pleno. "Alguien que pide a los ciudadanos europeos que hagan enormes sacrificios debería responder ante sus representantes", ha lamentado. A partir de ahí, se ha sucedido una catarata de intervenciones contra el jefe del Eurogrupo.

Actitud inaceptable

Para el presidente de los populares europeos, el alemán Manfred Weber, del mismo partido que la canciller Angela Merkel, la negativa de Dijsselbloem a comparecer es un "escándalo", "una actitud inaceptable" y una "falta de respeto". "Creemos que debería dimitir", ha dicho Weber, citando de nuevo los ataques del holandés a los países del sur. 

"El señor Dijsselbloem ha demostrado que no tiene la actitud adecuada para ser el presidente del Eurogrupo", ha resaltado el líder del grupo socialista europeo, Gianni Pittella. "Dijsselbloem es la persona equivocada para el Eurogrupo y debería marcharse sin esperar a que le sustituyan", ha coincidido la presidenta del grupo de Izquierda Unitaria, Gabriele Zimmer. El eurodiputado conservador francés Alain Lamassoure ha ido un paso más allá y ha pedido que se declara al holandés 'persona non grata'.

Al final del debate, Tajani ha subrayado la "unanimidad" en la Eurocámara y ha anunciado que enviará a Dijsselbloem una carta formal de "protesta" por su negativa a comparecer. El Parlamento Europeo no tiene poderes para forzar la destitución del presidente del Eurogrupo.

Dijsselbloem pretende aferrarse al cargo hasta el final de su mandato, en enero de 2018, pese a que dejará de ser ministro de Finanzas cuando se forme el nuevo Gobierno holandés, ya que su partido se hundió en las pasadas elecciones. Pero Guindos ha dicho que la cuestión volverá a discutirse en el Eurogrupo que se celebra en Malta este viernes.

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