“Las tecnológicas irán cayendo una tras otra”. Son las palabras de José Luis Groba, presidente de la Organización de Inspectores de Hacienda. Era una previsión de futuro. ¿Y en el pasado? Las grandes tecnológicas han pagado más de 120 millones de euros por diferentes actas tras investigaciones de la Agencia Tributaria. Apple, Amazon o Facebook no han tenido que vérselas con la AEAT, mientras Microsoft y el gigante del software Oracle se llevan la peor parte.
El guión se repite una y otra vez en estas multinacionales tecnológicas. Hacienda mantiene abiertos a inspección los cuatro últimos ejercicios de todos los impuestos. Muchas de esas pesquisas no acaban en sanción ni en acta de regularización, según ha comprobado EL ESPAÑOL tras consultar las cuentas de los últimos años de las principales compañías por capitalización bursátil. Cuatro de las nueve más grandes han tenido que ajustar cuentas en algún momento con Hacienda. Pero la cantidad es muy baja en comparación con su negocio.
Oracle, pago récord
En los últimos años, Oracle ha sido la multinacional del sector que más ha tenido que pasar por caja. Se trata de una gran corporación fundada en Estados Unidos a finales de los años 70 y uno de los gigantes del software empresarial. En los últimos años se ha visto obligada a pagar 87 millones de euros en impuestos impagados tras las actas levantadas por Hacienda.
El año 2009 no fue fácil en el seno de la filial español. En abril de ese año la Agencia Tributaria terminó las inspecciones de los ejercicios de 2003 y 2004 en el Impuesto sobre la Renta de No Residentes y levantó un acta por importe de 9,9 millones de euros. En noviembre, tal y como reza en las cuentas del año 2012, acabó la revisión de los ejercicios del 2005 al 2008. ¿El importe a pagar? 23,6 millones de euros.
En las cuentas recién cerradas de 2015, la empresa confirma que ha pagado por el Impuesto de Sociedades y el de No Residentes de los ejercicios entre 2008 y 2011 un total de 54 millones de euros. La compañía ha recurrido las actas levantadas y espera ganarlos.
¿Quién paga esas cantidades? La filial no sufre ningún impacto en sus cuentas. Y es que es Oracle EMEA, sociedad residente en Irlanda, la que se ha encargado de pagar esas cantidades.
La compañía, que sigue manteniendo bajo inspección los últimos ejercicios, pasó a operar a partir de 1997 como comisionista de Oracle EMEA para la comercialización y distribución de licencias de ‘software’ y soporte técnico de éstas.
La tecnológica cuenta en España, a cierre del ejercicio fiscal de 2015 (en junio), con una plantilla de 1.664 trabajadores. Sus ventas ascendieron a 189,7 millones de euros, un 10% más que un año antes. Logró un beneficio antes de tributos de 3,05 millones de euros. Pagó 1,9 millones de euros de Impuesto de Sociedades.
Microsoft, en los tribunales
La otra gran tecnológica que tiene cuentas pendientes importantes con Hacienda es Microsoft. La creadora del sistema operativo Windows acumula dos deudas que están a la espera de resolución judicial, según reza en las últimas cuentas presentadas en 2015. En total, suman 30,5 millones de euros.
En diciembre de 2011, la Agencia Tributaria levantaba un acta para el pago de 12 millones de euros por los impuestos de Sociedades y de No Residentes de los ejercicios 2004 y 2005. La filial, Microsoft Ibérica, recurrió ante el Tribunal Económico Administrativo-Central (TEAC) y tras ser desestimado, la compañía interpuso recurso ante la Audiencia Nacional cuya resolución no se ha conocido.
Justo un año después, en diciembre de 2012, recibió otra 'visita' de inspectores para indagar en el Impuesto de Sociedades de los años 2007 al 2009 y del IVA de 2008 a 2010. Los trabajos de la AEAT concluían con una propuesta de regularización de 18,4 millones de euros que también ha sido recurrido.
¿Cómo funciona Microsoft en España? Lo hace a través de una ETVE, una modalidad de sociedades regulada desde hace dos décadas y que permite a inversores extranjeros disfrutar de un beneficioso régimen fiscal. Bajo el paraguas de su matriz española ‘esconde’ 140 millones de negocio procedentes de Dinamarca de negocio del ejercicio 2015 (1 de junio de 2014 a 30 de junio de 2015). Y por la que pudo enviar en ese mismo ejercicio más de 26 millones de euros de dividendo a la sociedad norteamericana sin un importante coste tributario.
Google e Intel, el ‘chocolate del loro’
Hay otras dos compañías que han tenido que ajustar cuentas con Hacienda en los últimos años. Una es Intel, el fabricante de microprocesadores que en España opera con una filial que factura a la matriz europea, con sede en Irlanda. En 2009 apenas sumó 751.000 euros en una pequeña regularización tras una inspección ese mismo año del Impuesto de Sociedades de los ejercicios 2004 y 2005. La firma cerró 2014, último ejercicio del que hay disponible cuentas, con unos ingresos de 24,1 millones de euros y un beneficio antes de tributos de 1,3 millones.
La otra es Google España. Investigada ahora por Hacienda, la compañía del buscador sólo se ha visto obligada una sola vez a sacar la chequera. En 2013 su filial se puso al día con la Agencia Tributaria desembolsando 1,9 millones de euros, por el Impuesto de Sociedades de los ejercicios 2007 y 2008, tras un acta de mínima cuantía.
El resto no han protagonizado, según sus propias cuentas, ninguna regularización destacada. La red social Facebook, con su sede principal en Irlanda, no ha tenido ninguna inspección en la historia de su filial en España. Pese a contar con una parte significativa del mercado publicitario, la compañía fundada por Mark Zuckerberg ingresó 3,9 millones de euros y obtuvo unos beneficios antes de impuestos de 290.000 euros.
En cambio, Apple sí ha sentido de cerca a Hacienda en los últimos años. En todas las cuentas de sus dos sociedades se advierte: la Agencia Tributaria ha abierto inspección en los cuatro ejercicios anteriores para todos los impuestos que le corresponden como compañía. Pero no ha concluido en ninguna sanción, ni advertencia. Entre ambas firmas superó los 237 millones de euros durante el ejercicio 2014.
Por su parte, IBM, fabricante de hardware y software y desarrollador de servicios de infraestructura, alojamiento de internet y consultoría, opera con 3 sociedades distintas y con ninguna de ellas ha tenido que pagar más impuestos tras las distintas inspecciones recibidas.
El titán del comercio electrónico Amazon ha sufrido varias investigaciones en dos de sus sociedades (opera con tres dedicadas a servicios generales, logística y su línea de negocio de la nube que ‘cuelgan’ de una matriz en Luxemburgo). Pero ninguna ha concluido en sanción. Cerró el año pasado con 55 millones de facturación y un beneficio de 7,8 millones.