Fue un año complicado para Samsung en todo el mundo. La retirada de su móvil estrella, el Galaxy Note 7, por los problemas con la batería golpeó a la compañía coreana. Las consecuencias se percibieron en su negocio en España: la filial del país redujo un 3% sus ventas, un 20% su beneficio neto y un 11% su plantilla media. Esperan una “evolución positiva” para este 2017.
Durante ese ejercicio, la sociedad española ingresó 1.720 millones de euros, frente a los 1.761 millones de un ejercicio antes (una reducción frente al incremento del 12% de 2015). Pese a la reducción de gastos de personal y de la compra de productos para su distribución, el beneficio cayó hasta los 26,8 millones de euros (un año antes fueron de 34,1 millones, más del doble que un año antes). ¿La razón? Fuentes oficiales de la compañía precisan que en 2015 hubo un mejor resultado, después de que la sociedad se beneficiara de unos mejores tipos de interés.
“Es debido principalmente a la reducción de volumen de los mercados en los que opera y, en menor grado, por el impacto negativo de la crisis del dispositivo Note 7”, asegura en la memoria.
Presión competitiva y Note 7
Fuentes de la compañía aseguran que hay tres grandes factores. El primero tiene que ver con la “presión competitiva”, tras la entrada de otros fabricantes de móviles. El segundo se relaciona con el abandono de la venta de móviles de gama baja en el año 2015, cuyos efectos se han percibido en 2016. Y, por último, los problemas con el Note 7, “que se ha visto compensado en parte por el incremento de ventas del modelo S7”.
En la memoria de la compañía no se establece, como si hace a nivel global, el porcentaje de ventas de los distintos modelos de teléfonos móviles, de semiconductores o de servidores.
Para el año 2017, la filial espera tener una “evolución positiva” como consecuencia, según asegura, de “las acciones planificadas para incentivar la demanda de los productos que comercializa”.
La compañía ha cerrado el ejercicio con un efectivo y otros activos líquidos de 5 millones de euros (frente a los 3,6 millones de un año antes). En el lado de las reservas, entre la legal y las voluntarias, suman 213 millones de euros.
Sin inspecciones de Hacienda
La filial no ha recibido ninguna investigación de Hacienda, pese a tener abiertos a inspección los cuatro últimos ejercicios para todos los impuestos que corresponden. En el año 2016, pagó apenas 7 millones de euros de Impuesto de Sociedades (ingresó más de 1.700 millones).
¿Cómo opera Samsung en el país? La sociedad, al contrario que otras multinacionales tecnológicas, tiene como accionista único su matriz en el país de origen. En este caso se trata de Samsung Electronics Co, Ltd, con sede en Seúl (Corea del Sur).
La sociedad tiene firmados tres acuerdos con la matriz coreana. En febrero de 2010 suscribió un contrato de licencia por el uso de aplicaciones informáticas; en diciembre de ese año hizo lo propio para la prestación de servicios de soporte técnico.
Por último en 2012 firmó un pacto de distribución de los productos comercializados con la misma matriz ¿Los precios? “El precio de las transacciones [lo que se conoce como precio de transferencia, que es muy vigilado por Hacienda para evitar una reducción de los beneficios y, por tanto de los impuestos] se determina en base al precio neto del producto vendido al cliente, los costes estándar asociados y el beneficio de explotación objetivo”, asegura en la memoria.