No hay tiempo que perder. Banco Sabadell se queda sin tiempo para recuperar la confianza del mercado tras un batacazo que se ha llevado por delante más del 60% de su valor en Bolsa este año. En cuestión de un mes, el banco ha pasado de negociar su fusión con BBVA a su posterior ruptura para terminar con la llegada de César González-Bueno como nuevo consejero delegado en sustitución de Jaime Guardiola.
El consejo de administración del banco aprobó este jueves su nombramiento y, aunque aún falta la autorización del Banco Central Europeo (BCE), quien fuera protagonista del desembarco de ING en España trabaja ya en las líneas maestras del nuevo plan estratégico que Sabadell presentará al mercado durante el primer trimestre de 2021.
Según explican fuentes financieras, este tipo de autorizaciones del BCE suelen tardar entre dos y tres meses. Sin embargo, desde el banco explican que González-Bueno ya pasó un test de idoneidad para ser consejero de TSB, filial británica del Sabadell, por lo que confían en que esto pueda agilizar los trámites para que el visto bueno del regulador esté listo mucho antes. Así, los plazos coincidirían con los planes del banco para presentar su nueva hoja de ruta.
Parte activa del plan
Desde Banco Sabadell dejan claro que González-Bueno no solo será parte activa de dicho plan, sino que va a liderarlo, por lo que ya está trabajando para trazar sus líneas maestras, muy centradas en el segmento empresarial y, sobre todo, en digitalizar el negocio minorista.
El objetivo es mejorar la eficiencia y la rentabilidad del banco, que se ha visto seriamente mermada en los últimos años por los costes de reestructuración en TSB (en la que González-Bueno ocupa un puesto de consejero) y por la crisis. En concreto, la rentabilidad del banco medida por el ROE se situó en el 1,49% a cierre de septiembre, desde el 6,92% del año anterior. Una caída a plomo que será difícil de remontar.
A finales de 2019, la entidad estimaba que su filial británica dejaría de lastrar su rentabilidad en 2022. Y aspiraba incluso a lograr un ratio de doble dígito. Pero después llegó la pandemia y echó por la borda todos los planes. Los de Sabadell, y los de todo el sector.
Para lograr rentabilidad, la reducción de costes será clave en el nuevo plan, en un entorno de tipos negativos que complica mejorar los balances de los bancos vía ingresos. Esto, sumado a la digitalización del negocio minorista, ha provocado que algunas voces empiecen a temer un nuevo plan de ajuste a partir del segundo trimestre.
¿Nuevos ajustes?
En el primer trimestre, el banco tiene previsto completar su actual reestructuración pactada con los sindicatos, que afectará a un máximo de 1.800 trabajadores con prejubilaciones desde los 56 años y anticipadas desde los 63.
El plan estratégico se elaborará con estas cifras ya incluidas, pero el temor es que más adelante se planteen nuevos cierres de sucursales y, por lo tanto, más recolocaciones o salidas, para cumplir los objetivos que González-Bueno marcará para recuperar el atractivo de Sabadell, tanto para los inversores... como para posibles socios en fusiones.
Según explican fuentes sindicales, es posible que parte de esta incertidumbre haya provocado la avalancha de solicitudes de adhesión al plan de ajustes actual, que tal vez presente mejores condiciones que las que puedan llegar después.
Aún así, desde la entidad no tienen de momento nada planteado en este sentido, centrados ahora en el rediseño de su modelo de negocio. Para ello, González-Bueno trabajará estas semanas con Jaume Guardiola, que permanecerá en el banco hasta el 'ok' definitivo del BCE al nombramiento.
Tras acceder a su jubilación, con un importe acumulado de 24,1 millones de euros según el último informe anual de remuneraciones de los consejeros, el actual consejero delegado seguirá vinculado al banco como presidente de Banco Sabadell México. Desde la entidad indican que este cargo de carácter más "institucional" les ayudará para deliberar sobre el futuro del negocio azteca, bien sea para su expansión o directamente para su venta.