El nuevo impuesto se 'come' el 16,4% del beneficio global de los grandes bancos
Las seis mayores entidades del país habrían ganado un 36% más (en lugar de un 14%) si no hubieran hecho frente al primer pago de este impuesto.
6 mayo, 2023 03:07El nuevo impuesto a la banca ha hecho un roto considerable en los resultados del primer trimestre de las seis mayores entidades del país. En conjunto han logrado mejorar su beneficio, si bien el gravamen se ha 'comido' un 16,4% de sus ganancias, equivalente a 1.120 millones de euros.
Santander, BBVA, CaixaBank, Sabadell, Bankinter y Unicaja ganaron en el primer trimestre del año 5.695,7 millones de euros, lo que supone un 14% más que hace un año. La cifra sería, no obstante, un 36,2% más alta si los bancos no hubieran tenido que pagar el impuesto extraordinario al sector.
Este tributo grava con un 4,8% los ingresos por intereses y comisiones de las entidades de mayor tamaño. Se abona en dos pagos y la banca hizo frente al primero de ellos en febrero. El segundo desembolso llegará en septiembre (tercer trimestre).
Este primer pago ha costado al sector 1.119,8 millones de euros, lo que supone un 16,4% de las ganancias que habrían registrado de no tener que pagarlo, 6.814,7 millones de euros. Sin embargo, el pago ha hecho que su beneficio se haya quedado en 5.695,7 millones.
La cifra final, con todo, implica una mejora de los resultados del 14%, pues las seis mayores entidades del país ganaron 5.002,3 millones de euros en el primer trimestre de 2022.
Sabadell y Unicaja reducen sus ganancias
La entidad que más ha pagado por este impuesto ha sido CaixaBank, que opera mayoritariamente en España, con 373 millones de euros. BBVA ha abonado 225 millones, Santander otros 224 millones, Sabadell ha pagado 157 millones, Bankinter unos 77 millones y Unicaja, 63,8 millones.
Eso sí, el impacto ha sido diferente en cada banco. En el caso de Santander y BBVA, que cosechan la mayoría de sus beneficios fuera de España, el gravamen representa el 8% y el 10,9% de sus beneficios globales, respectivamente.
En el de CaixaBank, los 373 millones de euros abonados por el impuesto representan el 30,4% del beneficio que se habría anotado sin él. Similar dato para Bankinter (29,4%).
A Sabadell y Unicaja el pago de este gravamen les ha llevado a reducir su beneficio, a pesar de que la dinámica comercial de los bancos en este trimestre ha estado apoyada por la subida de los tipos de interés. Sabadell ganó un 4% menos, frente al 69% que habrían aumentado sus ganancias sin el gravamen. Unicaja redujo un 43% su beneficio y sin el impuesto habría ganado un 63% más.
Nuevas críticas
Con todo, estos resultados han levantado las críticas de algunos miembros del Gobierno, como ya ha ocurrido en otros trimestres. "Hoy hemos conocido unos datos muy alarmantes, hemos visto cómo la gran banca de este país ha ganado 5.700 millones de euros en el primer trimestre de este año. Esto significa que la gran banca, gracias entre a otras cosas a la subida de tipos, se está haciendo de oro a costa de las vidas de muchísima gente", apuntaba el viernes Ione Belarra, ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030.
En su opinión, el Ejecutivo se ha "quedado corto" con la creación del impuesto a la banca y ha adelantado que su formación, Unidas Podemos, va a proponer que se incremente el gravamen. "Es fundamental aumentar el impuesto a la banca a la vez que topamos las hipotecas variables", apuntó.
[AEB y CECA recurrirán esta semana el impuesto a la banca]
Gonzalo Gortázar, consejero delegado de CaixaBank, por su parte, respondía a estas palabras durante la presentación de resultados del banco, celebrada el viernes, al afirmar que, "como [los resultados] vienen de un nivel muy bajo, están en niveles razonables".
Todos los banqueros se han mostrado durante los últimos meses muy en contra del impuesto al consierarlo "discriminatorio", "confiscatorio" e "injusto". "Por supuesto que vamos a ser capaces de digerir el pago del impuesto con creces", adelantaba María Dolores Dancausa, consejera delegado de Bankinter, durante la última presentación de resultados. No obstante, criticaba que "los impuestos no se ponen por razones emocionales, en función de si eres guapo o no".
Los banqueros rechazan principalmente su mera puesta en marcha, pero también sus matices. Entre ellos, el hecho de que el tributo no afecte a todas las entidades (ING, por ejemplo, se queda fuera), lo que levanta desventajas competitivas, así como que se aplique indiscriminadamente, aunque el banco registre pérdidas, dado que grava la facturación en lugar del beneficio.