La gran paradoja de Putin: invade Ucrania mientras envía gas a máxima capacidad a la UE con precios volátiles
El gasoducto ruso que pasa por Ucrania está bombeando al 100% a Europa, mientras las sanciones a Putin siguen siendo poco efectivas.
28 febrero, 2022 02:45Noticias relacionadas
- La industria avisa: el alza de las materias primas, la luz y el gas provocada por la guerra se trasladará al consumidor
- La invasión rusa de Ucrania fuerza a España a una elevada inflación durante meses y a revisar su crecimiento
- Yturriaga, exembajador en Moscú: "La UE antepone su calefacción de gas ruso a la libertad de Ucrania"
La invasión rusa en Ucrania impulsó los precios energéticos en los mercados internacionales, pero solo tuvo un efecto de 24 horas. Pese a las subidas de hasta un 30% del gas en un solo día (TTF holandés) y del barril Brent hasta los 105,57 dólares, bajaron el viernes hasta los niveles previos.
En concreto, la cotización en la plataforma TTF se relajó hasta los 92 euros por megavatio hora (MWh), frente a los 144 euros en los que llegó a situarse el jueves, justo el día que comenzó la guerra. Aunque el nivel actual de cotización es elevado para los estándares históricos, todavía está lejos de los 180 euros/MWh que alcanzó en diciembre.
El precio del CO2 también experimentó una subida hasta los 92 euros/TnCO2 pero volvió a bajar hasta los 86 euros. Cayó hasta un 10% en el intradía.
Pero ¿por qué han caído los precios si la guerra no ha terminado? "Es la consecuencia de las sanciones económicas impuestas por Estados Unidos y Europa. Ha provocado que los mercados hayan respondido con una bajada de los precios y la cotización del Brent por debajo de los 100 dólares. Los mercados han considerado que la lista de sanciones económicas ha sido suave", señala a EL ESPAÑOL-Invertia, Manel Montero, experto en energía y combustible y director general de Grupo Moure, holding de estaciones de servicio.
"El mercado también valora la suposición de que Rusia llevaría a cabo una guerra a largo plazo en Ucrania", señalan por su parte los analistas de Vertis, consultora especializada en energía y trader de referencia en el mercado europeo de CO2 (EU ETS).
"Mientras dure la guerra, los mercados de energía vivirán una alta volatilidad, veremos precios por debajo de los 100 euros y al mismo tiempo por encima de 200 euros y todo ello en un breve espacio de tiempo", explica a este diario Francisco Valverde, experto en el sector eléctrico y consultor en desarrollo del área de renovables de eficiencia energética del grupo Menta Energía.
Sin castigo al gas
Las sanciones permiten específicamente que continúen los pagos de energía, y los suministros de energía están siendo monitoreados para detectar interrupciones. Al mismo tiempo, tanto EEUU como la Unión Europea se han comprometido una vez más en una campaña con países de todo el mundo “para elevar la liberación colectiva” de reservas estratégicas de petróleo de los principales países consumidores de energía. Estados Unidos liberará barriles de petróleo adicionales según lo justifiquen las condiciones.
Todos los analistas han calificado las sanciones como decepcionantes. Ninguna de las sanciones anunciadas hasta la fecha por EEUU, la Unión Europea o el Reino Unido, como la desconexión del sistema internacional de pagos SWIFT a los bancos rusos, se ha dirigido a ninguna entidad que se ocupe de transacciones de petróleo y gas en Rusia.
Alemania es quien está limitando la capacidad de los países occidentales de debilitar a Putin. El ministro de Economía alemán, Robert Habeck, ha dicho que "el 50% de nuestro carbón, el 55% de nuestro gas y el 35% de nuestro petróleo proviene de Rusia". Alemania es el país europeo con los mayores flujos comerciales con Rusia.
El hecho de que los mercados energéticos no se vean directamente afectados parece haber inyectado cierta calma a los mercados de que Europa no apuntará al suministro de energía de un país que representa más del 10% del suministro mundial de petróleo y casi 40% del gas natural que Europa importa.
El gasoducto de Ucrania, al 100%
En las horas posteriores a la invasión de Ucrania, hubo llamamientos para que Europa castigara a Rusia poniendo fin a las compras de energía. Pero la respuesta inmediata de las empresas energéticas europeas, sobre todo alemanas, fue comprar más gas natural, gran parte del cual se transporta a través de la red de gasoductos de Ucrania.
Estas compañías están solicitando más combustible en virtud de contratos a largo plazo con Gazprom porque los precios de los acuerdos hacen que las importaciones rusas se vuelvan más baratas que el gas al contado comercializado en los centros europeos.
Los precios actuales del gas están "muy por encima del precio de venta probable para muchos contratos de importación de Gazprom y, por lo tanto, impulsan las compras al alza", dijo Stefan Ulrich, analista de gas de BloombergNEF, después del repunte récord del jueves. "También puede haber un componente estratégico, ya que los compradores buscan comprar ahora dado el potencial de interrupción en los flujos o aumentos adicionales de precios".
La primera guerra de Europa del siglo XXI ha puesto de manifiesto su dependencia de los suministros energéticos rusos. Un tercio de la demanda de gas se satisface a través de gasoductos de los campos de gas siberianos, lo que genera miles de millones de ingresos cada año para la estatal Gazprom. Cortar esos suministros haría que los precios de la gasolina se dispararan y amenazara con cortes de energía, una perspectiva desagradable para los gobiernos que ya están lidiando con la contribución de los precios más altos de la energía al aumento de la inflación.
Los suministros de gas ruso a través de Ucrania aumentaron casi un 38% el jueves y, más aún, el viernes, hasta su máxima capacidad, según datos del operador de la red de Ucrania. Los envíos a Alemania a través de la ruta clave Yamal-Europa también podrían reiniciarse después de estar detenidos durante más de dos meses.
Gazprom ha dicho que sus suministros cumplen con las solicitudes de los clientes europeos. La alemana Uniper, la italiana Eni y la francesa Engie se han negado a hablar sobre los pedidos de gas ruso. La alemana RWE ha dicho que no especulará sobre desarrollos futuros en el mercado.
“Creo que el gas seguirá llegando a Europa a través de todos los corredores de exportación, incluido el de Ucrania”, siempre que no se dañen los oleoductos, dijo Katja Yafimava, investigadora principal del Instituto de Estudios Energéticos de Oxford.
Precios altos en 2023
Pese a esa caída, los precios energéticos sigue estándo en niveles récords. Y seguirán así al menos hasta 2023. Y no solo altos, también volátiles. Son las previsiones a largo plazo de un borrador de la Comisión Europea sobre los precios de la energía que se publicará el próximo mes, según ha adelantado Euractiv.
“Los precios de la energía siguen siendo motivo de gran preocupación en toda la UE. Los altos y volátiles precios del gas, fuertemente influenciados por la alta demanda mundial y las crecientes tensiones geopolíticas, impulsan los altos precios de la electricidad”, según el borrador, que aún podría modificarse antes de que se publique a principios de marzo.
El borrador contiene 12 acciones que la UE puede tomar para aliviar la continua crisis energética. Esto incluye desarrollar la capacidad de energía renovable, implementar ahorros de energía y apoyo continuo para los hogares y negocios afectados, tal y como anunció la comisaria europea de Energía, Kadri Simson, en su visita a España la pasada semana.
Las acciones también incluyen medidas para mejorar la resiliencia del suministro de gas de Europa.
En primer lugar, el ejecutivo de la UE propone un requisito legal para que los países de la UE garanticen un nivel mínimo de almacenamiento de gas antes del 30 de septiembre de cada año. Para asegurar un suministro continuo y una mejor preparación para el próximo invierno, habrá un 'Plan Gas para el invierno' para apoyar la seguridad del suministro “con incentivos y obligaciones para el almacenamiento estratégico”.
Junto a esto, la Comisión Europea iniciará un proyecto piloto este año para apoyar a los países y operadores de la UE en la realización de adquisiciones conjuntas para llenar el almacenamiento hasta el nivel estratégico mínimo requerido.
Pero, si bien el almacenamiento de gas ayuda a amortiguar los aumentos de precios, no tendrá ningún impacto para este invierno cuando los niveles de almacenamiento hayan alcanzado mínimos inesperados.
Por lo tanto, el documento también habla de diversificar los suministros del gas de los gasoductos rusos hacia el gas natural licuado (GNL), la mayor parte del cual se importa actualmente de Estados Unidos y Catar.