Ya se conoce cuál es el límite para que el gas participe en el mercado mayorista de electricidad. 30 euros el megavatio hora (MWh). Esta es la propuesta de que han consensuado España y Portugal para limitar el precio del gas y que han trasladado a la Comisión Europea para que dé el visto bueno a la conocida como "excepción ibérica".

El Gobierno ya lo había adelantado semanas atrás, pero se desconocía el importe. La razón de este desacople del gas en el mercado eléctrico es por el alto nivel de implantación de las energías renovables y las pocas interconexiones de la Península con el resto del continente europeo. La cifra se ha conocido primero por la prensa portuguesa y después la ha confirmado la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera.

"Tenemos una propuesta conjunta con Portugal y estamos trabajando con la Comisión", ha dicho Ribera.

"Es un documento previo que responde a las líneas maestras que habíamos trabajado con antelación, como introducir un sistema de doble casación, una en frontera para que las exportaciones de electricidad sean retribuidas al precio que correspondería en ausencia de un mecanismo de ajuste, y una segunda casación".

En este caso, "se introduce el ajuste y el pago por encima del coste del gas y es asignado automáticamente en ese margen que queda de tecnologías mucho más baratas hasta el precio que ha sido retribuido el gas a primera instancia".

"Todavía no hemos hecho más que empezar el trabajo con la Comisión, así que yo pediría tranquilidad y paciencia".

Además, se establecerá una doble casación para que la venta de electricidad a Francia no se vea afectada por la reducción de precios.

"Es una decisión que tiene sentido en un contexto de economía de guerra. Con los precios del gas desmadrados, no queda otra que pagar el gas aparte", explica a este diario el experto en sector eléctrico Joaquín Giráldez, socio cofundador de la consultora Ingebau.

"Habrá dos subastas para casar el precio de la electricidad. La primera, que es la 'normal', para que se pueda hacer intercambio con Francia; y una segunda, donde los ciclos combinados tienen subvencionada una parte del coste de su materia prima, el gas". 

"Si se van a hacer dos subastas, OMIE (operador del mercado) tendrá que adaptar sus sistemas informáticos a los cambios, y eso podría retrasar la aplicación de la medida", puntualiza Francisco Valverde, experto en el sector eléctrico y consultor en desarrollo del área de renovables de eficiencia energética del grupo Menta Energía.

Si finalmente la subvención sitúa el precio final en unos 30 euros/MWh, "el precio del pool sería de unos 90-120 euros/MWh, porque al coste del gas también hay que añadirle, entre otros elementos, el de CO2". 

Hasta el 30 de diciembre

Según ha adelantado el diario portugués Público, la medida pretende fijar en 30 euros el precio del mercado ibérico del gas (Mibgas), un precio "normal" de tiempos previos a la actual crisis de Ucrania, que ha provocado un encarecimiento de la energía que afecta a los países de la UE.

Ambos países explican que este coste deberá ser “internalizado por las tecnologías marginalistas”, las más caras, y va a proporcionar precios “más bajos” al mercado mayorista de electricidad, según indican en el documento.

Según el documento, este límite será "temporal" y vinculado a "circunstancias excepcionales que están provocando graves dificultades económicas" en Portugal y España. Por ello, estará vigente hasta el 30 de diciembre de 2022. Así, ambos países proponen aplicarlo “a las centrales de ciclo combinado a gas, a las centrales de carbón y a las cogeneraciones” del mix eléctrico ibérico