Sprint final de Alemania para la eólica marina: convoca una subasta de 5,5 GW, casi dobla el objetivo de España en 2030
Calienta motores también Reino Unido, donde se ha aumentado casi cinco veces el presupuesto para la próxima subasta de eólica marina.
8 marzo, 2024 02:36Después de unos años complicados para la eólica marina, empieza a moverse el sector en Europa. La Bundesnetzagentur (autoridad reguladora de la energía) alemana acaba de lanzar una nueva licitación de energía eólica marina por un total de 5,5 GW que se distribuirá en tres emplazamientos previamente examinados en el Mar del Norte.
"Las tres zonas, con una capacidad de producción total esperada de 5.500 MW, se encuentran a unos 110 kilómetros al noroeste de la isla de Borkum y limitan con la zona económica exclusiva holandesa", dice el Bundesnetzagentur en un comunicado.
La Agencia Federal Marítima e Hidrográfica ya ha examinado el entorno marino, el lugar de construcción y las condiciones eólicas y oceanográficas.
Según el anuncio, la Bundesnetzagentur utilizará un sistema de puntos como lo hizo en la última licitación. Se otorgarán hasta 60 puntos por el valor de la oferta: la cantidad que el postor está dispuesto a pagar. Sin embargo, también se utilizarán criterios cualitativos.
Se tendrá en cuenta la cantidad de electricidad procedente de fuentes de energía renovables utilizada en la fabricación de las turbinas eólicas, el porcentaje de personal en proceso de preparación, el uso de métodos de cimentación especialmente respetuosos con el medioambiente y el alcance del suministro de electricidad a largo plazo para terceros.
”Se otorgarán hasta 35 puntos en total por criterios cualitativos. El 90% del pago del adjudicatario se destinará a reducir los costes de electricidad. Las últimas subastas de plantas precalificadas en 2023 ascendieron a 1.800 MW y generaron unos ingresos totales de 784 millones de euros”, escribe Bundesnetzagentur.
La fecha límite para presentar ofertas es el 1 de agosto de 2024. Además de las subastas anunciadas, el pasado 29 de enero la Bundesnetzagentur también puso a subasta áreas con una capacidad total de 2,5 GW que no han sido todavía examinadas.
Eólica marina en Reino Unido
Por su parte, el Gobierno británico de Rishi Sunak ha anunciado que aumentará casi cinco veces el presupuesto para la próxima ronda de su emblemático plan de energías renovables. Y lo hará a través del esquema de Contratos por Diferencia (Cfd) mientras se esfuerzan por conseguir más ofertas de los principales desarrolladores de energías renovables.
El nuevo presupuesto se produce porque se intenta compensar el fracaso de su ronda de subastas del año pasado, que no logró asegurar ninguna oferta de energía eólica marina.
Según los documentos entregados por el Departamento de Seguridad Energética y Net Zero, el presupuesto general para la próxima ronda de asignación del plan CfD superará los 1.000 de libras (1.170 millones de euros), frente a un presupuesto de 227 millones de libras (265 millones de euros) para la ronda anterior.
La próxima ronda de subasta reservará 800 millones de libras (936 millones de euros) para energía eólica marina, según los documentos, mientras el gobierno busca recuperar la inversión perdida y alcanzar su objetivo de alcanzar 50 GW de capacidad eólica marina para 2030. Esa ronda, conocida como sexta ronda de asignación, comenzará en marzo.
Contrasta la rapidez tanto de Alemania como Reino Unido para lanzar las subastas de eólica marina, después de unos años maltrechos, con la de España, cuyo objetivo es de solo unos 3 GW para 2030 y que se espera la primera subasta a finales de año en el mejor de los casos.
Ørsted en EEUU
También se dispersan los nubarrones negros que han llevado al gigante danés de eólica marina Ørsted a una crisis sin precedentes. Durante los últimos seis meses ha pasado por una tormentosa noche invernal por los fallidos proyectos eólicos marinos en EEUU. Pero parece que empieza a salir del atolladero al haber sido seleccionado el proyecto Sunrise Wind de la compañía energética por las autoridades de Nueva York para negociar un nuevo contrato.
El nivel de precios que se está negociando no ha sido revelado, pero "el riesgo de que el proyecto no se lleve a cabo es insignificante", afirma el director general de Ørsted, Mads Nipper.
Difiere con el proyecto colapsado de Ørsted en el vecino estado de Nueva Jersey, el Ocean Wind 1, que puede haber sido la imagen del descarrilamiento en EEUU después de tener que amortizar unos 3.000 millones de dólares.
Por el contrario, Ørsted ha dicho que existe un potencial beneficio si se construye el parque eólico neoyorkino, el Sunrise Wind. Aún así, Nipper ya ha reconocido que Sunrise Wind no alcanzará el rendimiento requerido por Ørsted de entre un 1,5% y un 3% por encima del coste medio ponderado del capital (WACC). Sin embargo, la valoración es que el proyecto podría ser viable. Esto se debe, entre otras cosas, a que las autoridades federales estadounidenses acudieron en ayuda de la compañía energética danesa.
Con la Ley de Reducción de la Inflación, los proyectos de energía eólica marina tenían derecho a una devolución de impuestos (ITC) del 30% de la suma de la inversión. Sin embargo, Sunrise Wind ha aumentado esta cifra al 40%, lo que no es el resultado de un acuerdo turbio con los políticos, aunque sí es el resultado de tratos sucios y turbios.
El suelo donde se asentaba el cable de conexión entre parque y costa estaba contaminado. "Y eso define el área como un sitio abandonado, que califica para el 10% adicional de ITC a través del llamado bono de la Comunidad Energética”, dice el CEO. "Esta es la primera vez en la historia del mundo que me siento feliz por la contaminación del suelo", concluyó.