España dispara las compras de crudo a Venezuela a máximos de 2015 en pleno renacimiento de su industria petrolera
Las importaciones de petróleo a nuestro país alcanzan 1,7 millones de toneladas, con el mes de mayo marcando niveles récord desde 2002.
5 septiembre, 2024 02:32El resurgimiento del petróleo venezolano se siente en España. La llegada de crudo del país caribeño alcanza niveles que no se veían desde hace una década, cuando se inició el primer trienio del mandato de Nicolás Maduro.
En los siete primeros meses de 2024, las compras de España registran un incremento de 163% en relación con el mismo periodo del año anterior, según los datos publicados por la Corporación De Reservas Estratégicas De Productos Petrolíferos (Cores) este miércoles.
Las importaciones alcanzan en el presente ejercicio 1,7 millones de toneladas, un volumen que no se registraba desde el año 2015.
Sólo el pasado julio ascendieron a 353.000 toneladas, un 48% más que en el mismo mes de 2023. Además, en mayo alcanzaron las 632.000 toneladas, máximo mensual desde 2002.
El crecimiento de las importaciones coincide con el inicio del resurgimiento de la industria petrolera en Venezuela, que busca recuperar la fuerza que tenía en el mercado global.
Y es que la producción venezolana se sitúa actualmente en el entorno de los 900.000 barriles de petróleo diarios (según datos trimestrales de la OPEP), una cuarta parte de lo que registraba a finales de la década de los 60. Entonces, el país americano llegó a generar 3,5 millones de barriles al día.
El petróleo es la principal fuente de ingresos para Venezuela, pues posee las mayores reservas de crudo probadas en el mundo. Sin embargo, entre 2013 y 2021, la producción de petróleo se desplomó un 74%, según la Agencia Internacional de la Energía (AIE).
El presidente venezolano afirmó a finales de junio que la producción petrolera del país había alcanzado el millón de barriles diarios gracias al "esfuerzo propio", a pesar de las sanciones estadounidenses.
Además, Maduro prometió que el país suramericano llegará a una producción de 2,5 millones de barriles diarios en 2025, aunque con las cifras actuales no parece que este sea un objetivo alcanzable.
Control y declive
Desde que Nicolás Maduro llegó al poder, su control sobre la empresa estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA) no ha hecho más que aumentar. En este periodo ha colocado a sus allegados en posiciones clave para la empresa, que ha sido progresivamente militarizada y ha ido disminuyendo su autonomía.
En 2019, el entonces presidente de EEUU, Donald Trump, impuso sanciones contra los hidrocarburos del país. Esta decisión respondía al rechazo a la victoria electoral de Maduro en 2018 por presuntas irregularidades en las votaciones. Un año después, la producción llegó a caer hasta los 400.000 barriles diarios.
Joe Biden anunció en 2023 el levantamiento temporal de estas sanciones, lo que frenó la caída de la producción venezolana y animó al regreso al país de firmas petroleras internacionales.
El pasado mes de abril, Estados Unidos tomó la decisión de restablecer algunas de las principales penalizaciones contra el petróleo de Venezuela, en repuesta al incumplimiento de los compromisos electorales adquiridos por el gobierno de Nicolás Maduro.
Sin embargo, y pese a que la Administración Biden ha denunciado un fraude en las elecciones de Venezuela celebradas el 28 de julio, todavía no ha tomado ninguna decisión sobre nuevas actuaciones.
Y es que estas penalizaciones podrían suponer ahora un revés para algunos gigantes petroleros internacionales que han mostrado su interés o retomado operaciones en Venezuela. En este grupo se encuentran firmas de gran relevancia nivel global como Chevron (EEUU), Repsol(España), Eni (Italia), Shell (Reino Unido), China Petroleum o Indian Oil.
En el caso de la compañía capitaneada por Josu Jon Imaz, su intención es duplicar la producción de su sociedad mixta Petroquiriquire, que tiene con la estatal PDVSA tras un reciente acuerdo para ampliar las áreas asignadas a sus campos.
La nueva producción permite recuperar una deuda comercial pasada a algunas de estas empresas. Maduro ha hecho en varias ocasiones un llamado a empresarios internacionales para que inviertan en el sector petrolero, destacando que la nación caribeña ofrece oportunidades y relaciones mutuamente beneficiosas, y que su gobierno garantiza la producción.
Proveedores principales de España
Pese a ser el país que más está incrementando sus importaciones, Venezuela no se encuentra entre los principales proveedores de petróleo a España. En lo que va de año, su suministro supone un 4,5% del total, lo que convierte al país en el octavo vendedor de crudo, según las estadísticas de Cores.
El ránking de importaciones a España lo lideran Estados Unidos (con una cuota del 16,3%), Brasil (13,9%) y Nigeria (13%). Seguidamente, se encuentran México (12,1%), Angola (7,1%), Libia (6,4%) y Arabia Saudí (5,8%).
El crudo importado a España en julio disminuyó un 10,4%, mientras aumenta un 7,5% en el acumulado anual. Se importaron 28 tipos de petróleo originarios de 17 países.
Brasil (15,6% del total) se situó como principal suministrador de crudo a España en julio. Le siguieron Nigeria y México.