El presidente de Iberdrola, Ignacio Galán.
Iberdrola gana músculo financiero en EEUU con la venta de una planta fotovoltaica por 200 millones
La multinacional española está pendiente de que el regulador de Connecticut se pronuncie al respecto de la fusión con Avangrid.
Nueva operación de Iberdrola en Estados Unidos para hacer frente a sus ambiciosos planes en el país. A través de su filial Avangrid, actualmente en proceso de fusión, ha logrado alrededor de 200 millones de dólares (185 millones de euros) en ingresos netos gracias a la venta de una gran planta solar fotovoltaica ubicada en Oregón.
En concreto, se trata del parque Daybreak, con una capacidad de 189 megavatios (MW), que ha sido vendido bajo el modelo de sale-leaseback (venta y arrendamiento posterior). Esta estrategia permite a Iberdrola generar liquidez mediante el traspaso de la propiedad de la instalación, mientras conserva el derecho de uso del activo al arrendarlo de inmediato.
La operación fue acordada la semana pasada. Aunque no se conoce el nombre del comprador, según una carta remitida por Avangrid al Departamento de Energía de Oregón (previa al acuerdo), se trata de un "banco nacional y de buena reputación".
La planta, ya operativa, tiene una potencia suficiente para abastecer con energía limpia a 32.000 hogares de la región. En este sentido, la energía generada por el proyecto se venderá a Portland General Electric bajo un acuerdo de compra de energía (PPA, por sus siglas en inglés) por un período de 15 años.
Iberdrola consigue así nuevo capital para afrontar sus ambiciosos planes al otro lado del Atlántico. La multinacional capitaneada por Ignacio Galán colocó a Estados Unidos como su principal foco de crecimiento en su estrategia 2024-2026. Anunció inversiones por 12.600 millones de euros netos en los próximos tres años.
De cara a 2030, Avangrid anticipó a sus inversores unas inversiones orgánicas (sin tener en cuenta posibles fusiones, adquisiciones u operaciones con financiamiento externo) de más de 21.000 millones de euros.
Aproximadamente 14.000 millones de euros están reservados a inversiones planificadas para mejorar y mantener las redes eléctricas, financiadas en parte por las tarifas de electricidad y gas que abonan los consumidores. Este monto incluye, además, proyectos que ya fueron ejecutados en 2023.
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En concreto, unos 8.700 corresponden con las inversiones en redes están ligadas a las tarifas de Nueva York, más de 2.700 millones a tarifas de Connecticut y 2.400 millones a las de Maine.
Avangrid también tiene previsto invertir 5.600 millones de euros en proyectos de energía eólica terrestre y solar fotovoltaica, 4.300 millones en su megaplan de renovación de sus parques existentes (repotenciación) y más de 1.900 millones en proyectos de energía eólica marina.
Adicionalmente, 2.600 millones en inversiones corresponderán con otros proyectos renovables que se desarrollen bajo el marco de la ambiciosa ley Climate Leadership and Community Protection Act (CLCPA).
Y 700 millones asociados a la finalización del gran corredor eléctrico New England Clean Energy Connect (NECEC), que abastecerá a más de 1,2 millones de hogares en Nueva Inglaterra con energía limpia traída de Canadá.
Fusión de Avangrid
Avangrid anunció a finales de septiembre que sus accionistas votaron a favor de adoptar el acuerdo y el plan de fusión, por el cual la energética española adquirirá el 18,4% restante de las acciones emitidas y en circulación de Avangrid que no posee actualmente.
Según Galán, la operación aprobada permitirá a la filial estadounidense tener acceso de forma más ágil a los recursos financieros adicionales para acometer las inversiones previstas en el país.
Se espera que la operación, que ya ha recibido las aprobaciones del regulador federal (FERC) y de Maine, se cierre antes de fin de año. Es sí, la compañía sigue pendiente de un pronunciamiento crucial del regulador de Connecticut.
Y es que, en septiembre, el fiscal general de Connecticut y el asesor del consumidor presentaron una solicitud ante la Autoridad Reguladora de Servicios Públicos de Connecticut (PURA) para que revisase la operación de fusión, dado que constituye un "cambio de control".
A mediados de octubre, el regulador informó que considerará en dos fases la solicitud del fiscal y el asesor del consumidor. La fase inicial abordará la cuestión fundamental de si la fusión está sujeta a revisión por parte del organismo según la ley de Connecticut. Si PURA determina que sí, llevará a cabo procedimientos adicionales en una segunda fase para revisar la operación conforme a la legislación aplicable de Connecticut.
