Morrow, Northvolt, Varta… los fabricantes de baterías de la UE no pueden con los chinos: quiebras y un futuro sombrío
- Las ambiciones de Europa de liderar la industria del almacenamiento de energía corren el riesgo de desvanecerse ante el dominio de China.
- Más información: El fabricante sueco de baterías Northvolt triplica sus pérdidas, hasta 936 millones de euros
No pinta nada bien el futuro para la incipiente industria de baterías "made in Europe". Tras declararse en quiebra el fabricante sueco Northvolt hace pocos días, ahora le sigue el noruego Morrow Batteries, que se enfrenta al colapso si no llega una aprobación de 135 millones de euros en financiación estatal.
No son los únicos. El alemán Varta también está intentando levantarse, después de una reestructuración de la deuda. El inversor austríaco Michael Tojner y el fabricante de automóviles deportivos Porsche han respaldado un préstamo puente de 60 millones con prestamistas y bonistas.
Las perspectivas en la Unión Europea son especialmente sombrías en lo que respecta a las baterías, un importante motor de la economía baja en carbono. Si no terminan de resucitar estos fabricantes, este eslabón fundamental para que la generación de la energía en la UE sea (casi) cien por cien autóctona acabaría también -como ocurrió con los paneles fotovoltaicos- en manos de los chinos.
La sueca Northvolt fue considerada durante mucho tiempo como un potencial rival europeo de las gigantescas empresas chinas que fabrican la mayoría de las celdas de energía para vehículos eléctricos del mundo. Ahora, la empresa lucha por su supervivencia después de que una serie de errores operativos arruinara sus planes de crecimiento.
Quería competir con Contemporary Amperex Technology y otros gigantes chinos de las baterías, y para ello necesitaba crecer rápido. Así que la empresa acumuló miles de millones de euros en deuda y capital, garantizados mediante contratos por valor de 55.000 millones de euros con algunos de los mayores fabricantes de automóviles y camiones de Europa.
Correr demasiado deprisa
Su decisión era crecer agresivamente. Los planes abarcaban una rápida ampliación de la fabricación de celdas complejas, también la producción de componentes como materiales para cátodos, la construcción de nuevas fábricas y una empresa conjunta con el fabricante de automóviles Volvo. Northvolt incluso estaba desarrollando baterías de litio-metal para aviones eléctricos.
Y al actuar tan rápido, la empresa parece haber comprometido la calidad, lo que llevó a una gran cantidad de celdas defectuosas que no se pudieron utilizar.
En junio, BMW canceló un pedido de 2.000 millones de euros debido a problemas de calidad. La división de fabricación de camiones de Volkswagen, Scania, se quejó de las entregas lentas de Northvolt a principios de 2024. Northvolt también ha enfrentado una serie de problemas de salud y seguridad, incluidas lesiones laborales e informes de fugas de productos químicos tóxicos.
Hay más casos. La startup británica de baterías Britishvolt se declaró en quiebra en 2023 antes de poder abrir una planta de 4.800 millones de euros. Italia recientemente recortó la financiación para un proyecto de planta de baterías respaldado por Stellantis y Mercedes-Benz Group debido a la reciente disminución de la demanda de vehículos eléctricos.
Un sector de capa caída
Hay un exceso de capacidad global en el sector, según un informe de BloombergNEF en junio, lo que llevará a un período prolongado de precios bajos que favorecerá a los proveedores con la base de costes más baja. También hay un exceso de oferta en materiales para baterías.
Junto con Northvolt, hay otras empresas europeas que presentan batalla a las chinas.
Están las alemanas VARTA, Continental, Hoppecke, la italiana FIAMM Energy Technology, la francesa Saft (de TotalEnergies), la suiza Leclanché o la austríaca Banner, entre otras. Pero las empresas surcoreanas y chinas también tienen fábricas que abastecen a las plantas de ensamblaje europeas.
La nueva Comisión Europea deberá decidir cuánto debe impulsar la Ley de Industria Net Zero de la Unión Europea cuyo objetivo es que la región produzca 550 GWh de baterías para 2030, frente a los 110 GWh de 2023. Los líderes europeos han dejado en claro que quieren que la región sea un centro de tecnologías limpias, no un puesto avanzado de fabricación para empresas que repatrian las ganancias a Seúl y Shanghái.
Según Bloomberg Intelligence, China suministra aproximadamente el 80% de las baterías de iones de litio del mundo y alberga a seis de los diez mayores fabricantes de baterías para vehículos eléctricos del mundo. Las empresas chinas son incluso más dominantes en componentes de baterías, como cátodos, ánodos, separadores y electrolitos.
Si la UE no puede revertir la situación, los gobiernos de la UE se verían presionados a admitir efectivamente la derrota y abrir la puerta para que los actores chinos establezcan más fábricas en Europa para mantener viva la transición a los vehículos eléctricos.