Globalia sigue la estela de Iberia. La compañía propiedad de la familia Hidalgo ha anunciado a los sindicatos la intención de lanzar un Expediente de Regulación de Empleo Temporal (ERTE) por causas económicas que afectará, en un principio, solo a su división aérea que incluye Air Europa y Groundforce (su compañía de handling) y sus hoteles, según confirman fuentes de cercanas a la compañía a Invertia. Por lo que la división de agencias con Halcón Viajes a la cabeza se salva.
La decisión de Globalia, que afecta a 9.000 empleados, se trasladó anoche a los sindicatos después de que el Gobierno anunciara una prórroga de los ERTE de fuerza mayor hasta el 31 de enero, pero con condiciones. De ahí que ante la posible caída de la demanda aérea, el grupo haya decidido adelantarse con este nuevo ERTE ETOP, según avanza ‘El Confidencial’.
No obstante, la medida solo afecta a la parte aérea del grupo y según ha podido saber este medio se lleva a cabo por “precaución”. Al parecer, la dirección sólo aplicará estos dos ERTE si no hay prórroga para el sector aéreo. Es decir, lo mismo que ocurrirá en el proceso anunciado para 5.000 empleados de Iberia.
Problemas para Air Europa
La situación de Air Europa no hace más que empeorar. A pesar de recibir un rescate por parte de la SEPI de 475 millones de euros, la compañía no descarta solicitar una segunda ayuda estatal poniendo en peligro su compra por parte de Iberia.
Así, “prevé en función de las necesidades de liquidez” recibir “un importe adicional con las que solventar sus necesidades de liquidez futuras que requerirá la correspondiente solicitud de modificación de la ayuda con sujeción a la normativa aplicable”, según se desprende de las cuentas de 2020 ya publicadas por este medio.
A ello se suma que KPMG duda de la viabilidad de la compañía por el “alto grado de exposición del sector” en el que opera la sociedad a los efectos de la pandemia.
Debido a ello y sus problemas de tesorería, esta situación “indica la existencia de una incertidumbre material que puede generar dudas significativas sobre la capacidad de la Sociedad para continuar como empresa en funcionamiento”, señala la auditora.
Por su parte, la empresa de handling (Groundforce) cerró el pasado año con pérdidas de 21,67 millones de euros frente a los beneficios de 2,6 millones de 2019. Se trata de la primera vez en su historia que incurre en pérdidas, aunque lo peor es que existe “incertidumbre” sobre la capacidad de la compañía para continuar operando, según se desprende de las cuentas de 2020 recientemente depositadas en el Registro Mercantil.