Ex primeros ministros griegos presuntamente implicados en corrupción Novartis
Dos ex primeros ministros y ocho exministros griegos están presuntamente implicados en un escándalo de sobornos, desfalco y lavado de dinero protagonizado por la multinacional farmacéutica Novartis en el periodo 2006 a 2015 para promover sus productos en el mercado heleno.
6 febrero, 2018 08:32Entre las personas que figuran en el pliego que será entregado hoy al Parlamento heleno por la Fiscalía Anticorrupción figuran los dos jefes de Gobierno que precedieron a Alexis Tsipras, el jurista Panayotis Pikramenos, que en 2012 lideró durante un mes el Gobierno entre dos elecciones, y el conservador Andonis Samarás.
Entre otros figuran además el actual gobernador del Banco de Grecia y exministro de Finanzas, Yannis Sturnaras, el comisario europeo de Migración y exministro de Sanidad, Dimitris Avramópulos, así como el exlíder del partido socialista Pasok y antiguo ministro de Hacienda Evángelos Venizelos.
En la lista figura asimismo el actual ministro de Transporte, el expolítico de Pasok Panayiotis Kurumblís, quien en 2015, cuando Syriza accedió al Gobierno, fue nombrado ministro de Sanidad.
El escándalo de Novartis se remonta a 2016 cuando dos ex altos cargos de la multinacional suiza en Atenas se presentaron ante las autoridades de Estados Unidos y ofrecieron información sobre prácticas ilícitas del grupo para promover sus propios productos farmacéuticos.
Aseguraron que más de 4.500 médicos percibían recompensas de diversas formas por prescribir las medicinas de Novartis, cuyo coste era más alto que el de otros productos farmacéuticos similares.
Según los detalles del expediente filtrado por los medios locales, la fiscalía cree que con esta estrategia la compañía quiso no solo influir en los precios del mercado griego sino también en el europeo, pues Grecia es uno de los 18 países que figuran en la "cesta" de referencia para fijar los precios.
La investigación de la Fiscalía ha llegado a la conclusión de que hubo asimismo acuerdos entre Novartis y los ministros en cuestión -todos ellos responsables de carteras como Finanzas, Sanidad o Fomento- para retrasar u "obstaculizar" la presencia de los competidores de esta compañía en el mercado heleno.
Además, Novartis recibió un trato preferencial en el pago de pedidos farmacéuticos por parte del sistema de salud pública, justo en un momento en que la sanidad se encontraba en práctica quiebra debido a la crisis económica.
Según señala hoy la prensa local, en la mayoría de los casos los cargos de soborno y malversación -se habla de un daño al Estado por valor de unos 85.000 millones de euros- han prescrito, no así el de lavado de dinero.
Fuentes del Gobierno señalaron que Tsipras se reunió anoche con el ministro de Justicia, Stavros Kondonís, para estudiar los detalles del caso.
En declaraciones a los medios locales, Kondonís señaló que se trata del mayor escándalo económico desde la fundación del Estado griego.
La compañía, por su parte, evitó hacer comentarios sobre los nuevos detalles del escándalo y se limitó a señalar que está cooperando con las autoridades griegas.
"Novartis está comprometida con los más altos estándares de conducta ética y cumplimiento de la normativa en todos los aspectos del trabajo y toma todas las denuncias de posible mala conducta muy en serio", señaló la empresa en un comunicado.
Los políticos presuntamente involucrados, por su parte, negaron todos su implicación en el escándalo.
En un comunicado, Samarás afirmó que se trataba de una nueva "calumnia" de Tsipras contra él, mientras que Sturnaras -a quien el Gobierno actual tiene en poca estima- sostuvo que las recriminaciones persiguen "objetivos políticos" y difamarle.
Avramópulos, quien fue titular de Sanidad entre 2006 y 2009, aseguró que la fijación de precios se produjo cuando él ya no era ministro, y recalcó que no tiene "nada que ver con Novartis".
"Aquellos que me atacaron en el pasado lo lamentaron", dijo por su parte Venizelos.