La deuda soberana de EEUU es uno de los principales activos refugio en caídas de mercado como la actual. Y esta no es una caída cualquiera, sino la más pronunciada y veloz que hemos vivido en la historia desde que existen registros. Pasará tiempo antes de que la economía consiga recuperarse, para lo que será una condición indispensable que antes recuperemos la salud y que la amenaza del coronavirus se haya vencido o debilitado hasta permitirnos vivir nuevamente con normalidad.
La categoría VDOS de deuda pública USA, que invierte en emisiones de deuda del Tesoro de EEUU, muestra una notable resistencia en lo que va de año, con una revalorización media del 9%. Uno de los fondos de esta categoría con mejor dato de rentabilidad desde comienzos de año es Pictet - USD Government Bonds que en su clase R gana un 11,9% desde el pasado 1 de enero.
Invierte su cartera activamente en bonos gubernamentales en dólares, o cubiertos en esta divisa, teniendo como índice de referencia el JP Morgan US Government Bond (USD). También puede invertir en instrumentos del mercado monetario y emplear derivados para cobertura y gestión de la cartera, así como productos estructurados para obtener exposición.
Rentas periódicas
En circunstancias excepcionales, puede mantener hasta el 100% de sus activos netos en depósitos en efectivo, fondos del mercado monetario (con un límite del 10%) e instrumentos del mercado monetario.
El gestor del fondo es Andrés Sánchez Balcázar, CFA. Se incorporó al equipo de renta fija de Pictet AM en 2011 y es responsable del equipo de bonos globales. El equipo gestor trata de aumentar el valor de la inversión mediante rentas periódicas y crecimiento del capital, tratando de reducir la volatilidad mediante una cartera diversificada de emisiones con las mejores rentabilidades ajustadas por riesgo. Para ello combina análisis de mercado y de emisores con control de riesgos.
Con el objeto de generar resultados independientes de un único escenario o previsión, resistente a la volatilidad a corto plazo, definen temas macroestructurales a tres y a cinco años. Uno de ellos es que el sobreendeudamiento en el mundo desarrollado implica bajo crecimiento real y que los bancos centrales mantendrán los tipos de interés bajos un período prolongado de tiempo.
Además, identifican estrategias que ofrecen valor en estos temas desde la perspectiva ‘riesgo’/’no riesgo’ del mercado. Asimismo, realizan test de estrés de la cartera a diario, con análisis de correlación en diferentes escenarios, y gestión activa de la exposición a riesgo de cola con presupuesto de riesgos, para equilibrar las contribuciones de las diferentes fuentes de alfa a medio plazo.
También Australia, Canadá y Suecia
El fondo gestiona 74 posiciones de manera diversificada. Sus mayores inversiones con fecha del 28 de febrero son emisiones US Treasury N/B 6.375% 15.08.2027 Uns (3,52%), US Treasury N/B 6% 15.02.2026 Uns (3,34%), US Treasury N/B 6.5% 15.11.2026 Uns (2,79%), US Treasury N/B 2.25% 15.11.2027 Uns (2,71%) y US Treasury N/B 1.125% 30.09.2021 Uns (2,65%). Por calificación crediticia, un 90,6% de la cartera está invertida en 'AAA', un 7,2% en 'AA' y el resto, en acciones y liquidez. EEUU (90%), Australia (2,4%), supranacionales (1,5%), Canadá (0,9%) y Suecia (0,8%) representan los mayores pesos por países.
Por rentabilidad, el fondo se sitúa entre los mejores de su categoría, en el primer quintil, durante 2019, batiendo al índice de su categoría en el resto de los periodos anuales. A tres años, registra un dato de volatilidad del 8,25% y del 8,85% en el último año, periodo en que registra una ratio sharpe del 2,01 y un tracking error respecto al índice de su categoría del 4,13%.
La clase R de Pictet - USD Government Bonds aplica a sus partícipes una comisión fija de hasta el 0,9% y de depósito de hasta un 0,2%. La clase R es la de base del fondo, denominada en dólares. La estrategia tiene otras clases con cobertura de divisas en euros, como la HI.
La propagación del coronavirus tendrá más impacto en la economía mundial de lo que se pensaba a corto plazo, con perturbaciones como una parte significativa de la población sin trabajo, parálisis del flujo de capitales y de población y sobrecarga de los sistemas de salud.
Política monetaria vs. fiscal
La escasa liquidez y estrés en los mercados de crédito debe ser la principal preocupación de los bancos centrales, cuya flexibilización de política monetaria e inyecciones de liquidez deben aliviar presiones, de manera que los mercados sean capaces de poner en precio el riesgo de una forma más eficiente. EEUU es, entre las grandes economías, la que tiene más margen de política monetaria, pues en la Eurozona o Japón unos tipos de interés más negativos pueden tener efectos perjudiciales en el sector financiero.
El caso es que, en esta crisis, a medida que se acaba la munición de política monetaria, se puede crear consenso respecto a la política fiscal como principal herramienta anticíclica.
De todas formas, la situación seguirá volátil, con movimientos bruscos en ambas direcciones en función de las políticas, flujo de noticias y liquidez disponible. Debemos evitar los extremos del mercado y mantener la cartera equilibrada entre posiciones ‘riesgo’/’no riesgo’, aprovechando oportunidades interesantes en un mercado turbulento.
*** Paula Mercado es directora de análisis de VDOS.