Ayer conocimos que la Unión Europea trabaja con un escenario de contracción de las economías de la zona euro del 7,75% este año para crecer un 6,25% en 2021.
Uno de los efectos más demoledores que el confinamiento está provocando sobre la economía involucra directamente sobre el gasto del consumidor, la producción industrial, la inversión, el comercio, los flujos de capital y las cadenas de suministro.
Y como es obvio todo lleva sus efectos sobre el empleo. Se estima que nos vayamos a tasas de desempleo del 9% para este 2020 para luego bajar lentamente hasta el 8% para el 2021 aunque realmente todo dependerá de la velocidad a la que se puedan levantar los bloqueos.
Lo que tenemos de manera más inmediata en el camino lo refleja claramente el gráfico anterior de Bloomberg: las ventas minoristas de Italia con un desplome sin precedentes en comparación del mismo mes del año pasado.
Una caída del 21,3% que puede convertirse en mucho más profunda si no se pueden abrir las puertas al turismo este verano en países como Italia o España, donde aquí representa el 15% del PIB.