El efecto más pronunciado del Covid-19 se observó en los puestos de trabajo. Se estima que alrededor de 175 millones de empleos a tiempo completo se verán afectados en la región de Asia y el Pacífico, unos 140 millones en el grupo de los países BRICS. Hace falta mencionar que los jóvenes son las principales víctimas de las consecuencias sociales y económicas de la pandemia. Y existe el riesgo de que sufran cicatrices durante toda su vida labora, lo que lleva a la aparición de una 'generación de encierro'.
A pesar de que en algunos países, como por ejemplo, Reino Unido, los datos de empleo empezaron a mostrar una capacidad de recuperación en abril, todavía no podemos descartar el aumento del desempleo a finales de este trimestre. Junto con ello, se pronostica que habrá una segunda ola de despidos entre agosto y octubre a medida que suspenden las ayudas del gobierno.
De acuerdo con los últimos datos, el número de personas que recibieron el subsidio del desempleo aumentó en 1,6 millones, mientras que la tasa de desempleo se mantuvo en 3,9%. Junto con ello, hubo una caída de 162.500 empleados asalariados en mayo, siguiendo a una disminución de 449.400 en abril. El problema está en que estos datos excluyen a los trabajadores por cuenta propia, por lo que es probable que se subestime el incremento del desempleo. En este contexto, es necesario mencionar que alrededor de 130.000 de autoempleos han desaparecido en los tres meses hasta abril.
Como resultado, no debería ser ninguna sorpresa que el Banco de Inglaterra anuncie un nuevo aumento de al menos 100.000 millones de libras en su capacidad de compra de bonos esta semana.
El resto de los países están en una situación parecida. El ministro de Hacienda de China dijo este lunes que el país emitirá bonos especiales del gobierno por 100.000 millones de yuanes (alrededor de 14.126 millones de dólares) para medidas de control del Covid-19. La administración del presidente Donald Trump, por el otro lado, prepara un plan de 1 billón de dólares destinado a infraestructuras como parte de su esfuerzo para estimular la economía estadounidense.
Hablando del par euro/libra (EUR/GBP), mucha atención al mayor nivel de resistencia en 0,9020. Si lo rompen, podría subir a 0,9050-0,9067, antes de llegar al nivel psicológicamente importante 0,91. Si no se consigue superar dicho nivel de resistencia, podría caer de vuelta a 0,8863 – 0,8875. Los niveles de soporte se encuentran alrededor de 0,8945, 0,8912, 0,8863, 0,8840 y 0,8794. Los niveles de resistencia están en 0,9020, 0,9050, 0,91 y 0,9133.
Por último, si el Banco de Inglaterra aprueba los tipos de interés negativos, podría pesar aún más en la libra. Si la inflación cae demasiado rápido, los tipos de interés reales dejarían de ser acomodaticios con los costos de endeudamiento superiores a los aumentos de precios.
Para que la libra suba, la inflación tendría que alcanzar el punto de entre alrededor del 0,3% y el 1% mostrando que la inflación es baja y que más flexibilización cuantitativa (QE) ayudaría. Si la inflación sorprende con más del 1%, podría resultar en menos estímulo del BOE quizás menos de £100 mil millones en nuevos fondos, enviando así la libra esterlina hacia abajo. El IPC cerca del 0% o negativo (deflación) pesaría sobre la libra. Por eso, la reunión del Banco de Inglaterra será crucial para la libra esterlina.
**Igor Kuchma es analista de Trading View.