Solaria busca consolidar su fase de rebote con un cierre por encima de los 8,32 euros
- El mercado anticipa una fuerte revalorización de las compañías renovables durante 2025 tras las fuertes caídas registradas en el año anterior.
- Más información: El Ibex 35 se frena antes de recuperar el nivel de los 11.700 puntos
En la segunda sesión del año, el Ibex 35 tiene como objetivo enfrentarse a la media móvil de medio plazo en los 11.690 puntos. Un cierre semanal por encima de este nivel sería un logro destacado, consolidando además la ruptura de los 11.600 puntos alcanzada en la sesión anterior. Entre los valores del índice, las acciones de Solaria sobresalen por su comportamiento alcista, situándose en los primeros puestos de la tabla.
El sector de las renovables está registrando un interesante y muy alcista inicio de ejercicio. En la jornada previa, Solaria subió más del 6%, destacando junto con Acciona Energía como las compañías más alcistas del sector en estas primeras sesiones. Este rebote ocurre tras el desplome generalizado del sector en 2024, cuando estas empresas fueron las más castigadas del selectivo español.
En el caso de Solaria, sus acciones cayeron un 58% en 2024, posicionándose además como la séptima más bajista dentro del índice mundial de renovables, el S&P Global Clean Energy, que agrupa a 100 empresas del sector a nivel global. Además, ha sido un valor asediado por las posiciones cortas. Para 2025, el mercado espera una revalorización en renovables, aunque será crucial evaluar el impacto de la reciente elección de Donald Trump como presidente de EE. UU.
Desde un punto de vista técnico de medio y largo plazo, los títulos de Solaria muestran un perfil muy bajista. La formación de una primera onda bajista, que se inició a finales del 2023, llevó al valor a probar la zona de soporte en torno a los 9,40 euros en abril pasado. Este nivel representó un intento fallido de revertir su tendencia a la baja, a pesar del rebote que se produjo desde esa zona, evidenciando la debilidad estructural del valor.
Posteriormente, tras un período de recuperación, el valor volvió a caer debido a la presión vendedora y aumento de las posiciones cortas, en forma de una nueva pata bajista, llevando su cotización a niveles no vistos desde enero de 2020, alcanzando en el descenso los 6,675 euros.