Sevilla

Renault ha escogido Sevilla para liderar su recuperación económica y su transformación empresarial. Con los retos del sector del automóvil sobre la mesa, la compañía está trabajando en un proyecto de economía circular que contará con la ciudad andaluza como gran aliada. La iniciativa aumentará y transformará la producción de su planta sevillana activa desde 1966.

En vías de desarrollo, el proyecto tiene una vocación nacional y va en línea con el modelo de negocio que actualmente se está confeccionando. Así lo confirman fuentes de Renault a Invertia que aseguran que la producción de Sevilla crecerá dado que dicha iniciativa se sumará a los trabajos convencionales

Las citadas fuentes confirman que el proyecto se preparará a nivel nacional y se adaptará a cada una de sus factorías de España. El grupo cuenta con las factorías de carrocería de montaje de Palencia y Valladolid, la planta de motores de Valladolid y la fábrica de cajas de velocidades de Sevilla.

Con una superficie que supera los 211.840 metros cuadrados, la planta sevillana es una de las más históricas de Renault en España. Presume de ser una factoría con perfiles profesionales altamente cualificados y con una cadena de alta capacidad para producir en serie. Exporta el 88% de su producción a 30 clientes de cuatro países.

Factoría sevillana de Renault. Europa Press

Su labor verde comenzó con la redacción de la política medioambiental enfocada concretamente para la factoría sevillana que se actualiza anualmente. Renault se comprometió a prevenir y reducir la huella ambiental en sus actividades. Para ello, asegura el control del consumo o la prevención de la contaminación de las aguas subterráneas, entre otras cuestiones. 

“España tiene que ser el eje de lo híbrido y una referencia en la descarbonización con fábricas que generen cero emisiones”, aseguró el presidente de Renault España, José Vicente de los Mozos. En una visita a Sevilla, transmitió que Sevilla tenía que ser la referencia nacional de Renault de economía circular y descarbonización.

Pese a la inminente transformación del sector, el presidente optó por “transformar” las factorías con proyectos ambiciosos que se centren en la competitividad. Y es aquí donde Sevilla tiene un papel clave. “La fábrica de Sevilla no se va a cerrar. Tiene que evolucionar a la electrificación”, subrayaba entonces.

Con el Gobierno andaluz

La Junta de Andalucía participa en el proyecto de economía circular que Renault ultima. Así lo destacó el consejero de Transformación Económica, Rogelio Velasco. Explicó que la producción sevillana debería ir en línea con la transformación que marcarán los coches eléctricos y la prohibición de la venta de vehículos de combustión a partir de 2035.

Imagen de archivo del presidente de la Junta de Andalucía y el presidente de Renault España.

“Es una oportunidad industrial para Andalucía que debemos aprovechar”, opina el titular también de Industria. El sector de vehículos emplea en la región a 17.600 trabajadores y representa un 3,2% del PIB regional. 

“Será prioritario la reducción de su propia huella de carbono, pero deben ser aceleradores de esta transición, proporcionando soluciones tecnológicas limpias y asequibles y nuevos modelos de negocio”, ha apuntado Velasco en el marco de las conversaciones que mantiene con Renault.

Los retos del sector

Este proyecto, cuya confección continúa, tiene varios retos sobre la mesa que deberá afrontar para garantizar su competitividad. El más reciente lo ha decretado la Comisión Europea que ha puesto fecha al fin de la venta de coches de combustión. Será en 2035 y a través de un gran proyecto climático alineado con los objetivos de los Fondos Europeos

A ello se suma el protagonismo que ya toma el coche eléctrico, tal y como demuestra el primero de los proyectos estratégicos para la recuperación y transformación económica (PERTE). El Gobierno confía en crear con ello 242.000 nuevos empleos y sumar 25.700 millones de euros al PIB anual.

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