Durante prácticamente toda su historia el automóvil ha estado intrínsecamente conectado con el concepto de propiedad. Los coches han sido uno de los bienes con los que los ciudadanos más han distinguido su estatus. El vehículo particular venía a ser una proyección a la sociedad de la personalidad y las capacidades económicas de los individuos.
En los últimos años este modelo ha saltado por los aires. Al igual que en otras industrias, la propiedad se ha convertido en una opción, no en una obligación. El desarrollo tecnológico ha permitido abrir una nueva vía por la que los usuarios pueden pagar, solamente, por el tiempo en el que están usando un servicio.
Este concepto está en el ADN de la propuesta de valor con la que nuestro invitado de hoy, Alain Visser, dirige Lynk & Co. Una compañía para la que vender coches es sólo una opción más dentro de su porfolio. De su mano repasamos las claves de la transformación que está viviendo la industria del automóvil en uno de sus momentos más vibrantes.
¿Cómo surge la idea de poner en marcha Lynk & Co?
Llevaba 35 años en la industria de la automoción. En mis últimos años estaba un poco desilusionado. Pese al gran poder que siempre ha tenido esta industria, los cambios eran muy pequeños. El modelo de negocio prácticamente no evolucionó durante décadas. Fabricábamos coches, los mandábamos a los concesionarios, ellos los vendían... En un mundo en el que las necesidades de los consumidores están cambiando más rápido que nunca, no podía ser que nada evolucionara en esta industria.
El mundo no necesita una nueva marca de coches. El mundo lo que necesita es una mejor movilidad. En un contexto como el actual en el que la sostenibilidad es una prioridad, no tiene sentido continuar con un modelo de negocio en el que el 95% del tiempo tu producto no se está usando. Esto no cambia aunque vendamos coches eléctricos.
Hay un cambio de propiedad a la experiencia. La gente paga por experiencias más que por poseer cosas. Hemos intentado poner todo esto en el concepto de Lynk & Co. Queremos hablar más de nuestro concepto que de nuestro coche. En un sólo pago de 500 euros al mes tienes incluido el seguro, todos los servicios... Además, puedes bajar el coste mensual haciendo sharing cuando no estás usando el coche para que otras personas sí que lo puedan utilizar.
Del mismo modo, en lugar de concesionarios tenemos nuestros clubs. Un espacio con los coches, un bar... Un espacio donde nuestra gente puede transmitir nuestro concepto.
¿Es el cambio de producto a servicio más profundo para su industria que la electrificación?
Comprar un coche no tiene que ser la única solución. Un 10% de la población europea está cansada del modelo tradicional del coche. Ese el nicho en el que nos queremos centrar. Tenemos a todas las marcas peleando por ese 90%, pero nosotros queremos ser el modelo para ese otro 10%.
Incluso el leasing es un compromiso muy largo para el mundo en el que vivimos. Tienes que firmar 24 o 36 meses. Con nosotros puedes firmar un mes. Lanzamos el servicio de suscripción en 2016. Muchas empresas dicen que ofrecen suscripción, pero la realidad es que en la gran mayoría de casos es marketing. Son leasing cortos.
Nosotros ofrecemos utilizar un coche, no comprar un coche.
¿Puede el sharing convertirse en el modelo principal de la industria del automóvil?
Cada vez más gente se pregunta si realmente necesita comprar un coche. Están surgiendo muchos tipos de empresas alrededor del sharing. Lo que creo que hace nuestra propuesta más atractiva y disruptiva es que lo combinamos todo.
Nuestros clientes pueden pagar sólo un mes por usar uno de nuestros coches. Además, si un mes se van de vacaciones y no van a usar ese coche pueden ganar dinero dejando que otros usuarios lo usen.
La combinación de estos elementos hace que la propuesta de valor de Lynk & Co sea única y las cifras cada vez lo demuestran más. En España, donde no hemos hecho publicidad, ya tenemos a 5.000 personas esperando uno de nuestros coches.
Para seguir la conversación completa
- Escúchala en Ivoox
- Escúchalo en Apple Podcast
- Escúchalo en Spotify
- Escúchalo en Google Podcast