"En 2023 cumplimos el ambicioso objetivo -establecido hace diez años- de lograr una facturación superior a los 45.000 millones de dólares. Con el crecimiento de nuestra innovadora cartera, que tiene el potencial de transformar millones de vidas, ahora aspiramos a recaudar 80.000 de dólares para 2030", ha dicho Pascal Soriot, director ejecutivo de la farmacéutica.

"Estamos planeando lanzar 20 nuevos medicamentos para 2030, muchos de ellos con el potencial de generar más de 5.000 millones de dólares en ingresos anuales. La amplitud de nuestra cartera, junto con la inversión continua en innovación, respalda un crecimiento sostenido mucho más allá del final de la década", ha añadido.

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Según el comunicado publicado por la compañía, AstraZeneca mantendrá su compromiso estratégico con la I+D mientras se centra en la productividad, impulsando el apalancamiento operativo y permitiendo cumplir con un margen operativo de alrededor del 30% para 2026. 

La presentación de esta estrategia coincide también con el anuncio que hizo este lunes el laboratorio de invertir 1.500 millones de dólares (1.380 millones de euros) en la construcción de una nueva planta de producción de terapias contra el cáncer en Singapur.

En concreto, producirá lo que se conoce como anticuerpos conjugados (ADC). Se trata de medicamentos de próxima generación que administran agentes anticancerígenos muy potentes directamente a las células cancerosas a través de un anticuerpo dirigido.

Será la primera planta de producción de este tipo de terapias de AstraZeneca que incorporará completamente todos los pasos del proceso de fabricación a escala comercial, que comprende la producción de anticuerpos, la síntesis del fármaco de quimioterapia y el conector, la conjugación del fármaco-enlazador con el anticuerpo y el llenado de la sustancia ADC completa.