Materiales más caros y falta de mano de obra auguran subidas del 3% en la vivienda
Michel Elizalde, CEO de ACR, añade un tercer componente que puede inflar precios: una oferta que no satisface toda la demanda.
15 septiembre, 2021 02:16Noticias relacionadas
El precio del acero ha subido un 35% en los últimos nueve meses. Eso se traduce en que el coste de una estructura en una vivienda cueste un 28% más. Pero es que, además, el coste de las cimentaciones ha aumentado un 23,5% en el último año; el de las divisiones interiores, un 7,5%; la carpintería de madera, un 18,3%; las pinturas, un 9,5%; la vidriería, un 8,9%…
Los costes de construcción en el mercado residencial subieron un 13,5% interanual hasta septiembre. Un año antes, se había producido un descenso del 1,7%. Eso se traduce en que los precios se han disparado más de un 10% durante los últimos nueves meses. Son datos del Índice de Costes Directos de Construcción elaborado por ACR.
“Del coste total de una vivienda, aproximadamente, el coste de construcción viene a representar entre el 30% y el 40%”, explica Michel Elizalde, CEO de ACR. Y añade: “Si este coste de construcción subiera un 13%, en el caso hipotético de que todo ese coste se le trasladara al cliente, y este al comprador, la vivienda subiría un 3%”.
De momento, promotoras y constructoras se han echado a la espalda ese incremento de las materias primas. Pero si la situación se sostiene en el largo plazo, Elizalde lo tiene claro: “Habrá que renegociar”. Eso sí, advierte de que “nunca se acaba trasladando todo el incremento de costes”.
A ello hay que añadir que hay una demanda que la oferta actual no está cubriendo. “Hay más demanda de vivienda de lo que se está dispuesto a producir. Y durante mucho tiempo va a ser así”, pronostica Michel Elizalde. Una oferta que está entre las 80.000 y 90.000 unidades, frente a la demanda que ronda las 140.000. “Se traducirá en una senda alcista de precios pero sin sustos”, matiza el CEO de ACR.
Fondos Next Generation
A la tensión entre oferta y demanda, y el incremento de las materias primas, hay que añadir un tercer player que augura subida de precios: la falta de mano de obra. Según la Confederación Nacional de la Construcción (CNC) se necesitan 700.000 trabajadores. “Va a ser el gran problema porque el incremento del precio de los materiales tiende a estabilizarse”, comenta Michel Elizalde. Estabilización, que no bajada de precios.
Fue a partir de 2018 cuando la contratación comenzó a caer. Incluso, en determinados casos, hizo que desaparecieran algunas empresas. “La situación no se va a solucionar de forma inmediata. Hay un problema de renovación generacional tremendo que no se va a resolver vía salarios”, especifica. Ahí la formación será clave para resolver esta carencia.
Un cóctel explosivo que se da en un momento en el que la construcción podría aprovechar los vientos de cola que supondrán los fondos Next Generation. “Los fondos pueden estar en riesgo dependiendo de la rigidez que se exija. Habrá actividades que se irán retrasando”, indica Elizalde.
El Gobierno prevé destinar 4.500 millones de euros para la rehabilitación de viviendas a través de dichos fondos. En concreto, medio millón de viviendas entre 2021 y 2023. “La rehabilitación es muy compleja de gestionar. El único modo de poder hacerlo es con la administración tomando un papel activo”, remarca el CEO de ACR.
Michel Elizalde realizó estas declaraciones durante la presentación de la nueva marca ACR. Su propósito es el de ir hacia una industria más responsable, innovadora y sostenible. La constructora tuvo un beneficio antes de impuestos de 3,3 millones de euros en 2020, lo que supuso un incremento del 54%.
Las ventas fueron de 243 millones en 2020 (un 45% más). Hasta julio de este año, han llegado a los 123 millones. Su cartera a cierre de 2020 fue de 254 millones, llegando a 300 millones en julio de 2021.