Activistas climáticos se pegan al asfalto del aeropuerto de Barajas y obligan a cortar una pista

Dos activistas del colectivo ecologista Futuro Vegetal se han colado a primera hora de la mañana de este viernes en una pista de aterrizaje del aeropuerto Adolfo Suárez-Madrid Barajas y han pegado sus manos al asfalto, informa Europa Press. La acción del colectivo ha dejado inoperativa entre las 6 y las 9 horas una de las cuatro pistas del aeródromo madrileño, según confirman a Madrid Total fuentes de Aena. 

"Nuestras compañeras acaban de burlar la seguridad del aeropuerto de Madrid-Barajas y han accedido a la pista de aterrizaje, donde han pegado sus manos al asfalto para impedir el tráfico aéreo", ha anunciado el colectivo a través de su cuenta de Twitter. Junto a este primer comentario, publicado a las 6:32 horas, han añadido una fotografía de las dos activistas sentadas en la pista del aeropuerto y con un cartel desplegado con el lema 'El pueblo unido funciona sin partido'.

Con ese mensaje, ha detallado en una serie de tuits posteriores, el objetivo es hacer un "llamamiento a la población a que, con independencia del resultado de las próximas elecciones, se organice para hacer frente a las consecuencias de las Crisis Climática". 

"No podemos ocultar nuestra preocupación ante unas elecciones en las que ningún partido político está proponiendo unas medidas a la altura de la amenaza que supone la Crisis Climática", ha añadido el colectivo. 

La Guardia Civil investiga el suceso y se han abierto diligencias por daños en un juzgado, han señalado fuentes del Instituto Armado a Europa Press. Las dos mujeres, en concreto, se han pegado al pavimento de la zona anterior a la cabecera de la pista 32R.

[Futuro Vegetal. Radiografía del nuevo activismo radical]

En su comunicado, Futuro Vegetal responsabiliza -sin dar nombres- a "determinados políticos" de tener "posicionamientos abiertamente negacionistas", aunque también critica que "otros" den una "falsa sensación" de que se toman "en serio" la crisis del clima, ya que sus propuestas, lamentan, se limitan a ser "meras reformas" que solo refuerzan "el sistema que ha traído a esta situación".

Según el colectivo, su campaña no va dirigida a posicionarse a favor de la abstención en las elecciones, sino que lo que pide es "construir en común", superando diferencias e intereses.

"Está claro que no todos los partidos son iguales, pero también que sólo la sociedad organizada puede impulsar los cambios que necesitamos para tener un territorio habitable", señalan.