Detenidos por embestir a una furgoneta de la UPR tras saltarse un control en Marbella (Málaga)
Dos policías han resultado heridos en el incidente, presentando uno de ellos un dedo fracturado, mientras que otro sufre lesiones en cervicales y espalda.
2 agosto, 2021 14:57Noticias relacionadas
Agentes de la Policía Nacional han detenido a los ocupantes de un vehículo, tres hombres de 29, 36 y 41 años, todos ellos de nacionalidad española, después de que supuestamente se saltaran un control en Marbella (Málaga) y acabaran embistiendo a una furgoneta de la UPR.
Dos policías han resultado heridos en el incidente, presentando uno de ellos un dedo fracturado, mientras que otro sufre lesiones en cervicales y espalda, ha informado la Policía Nacional a través de un comunicado.
Los hechos tuvieron lugar este pasado sábado, sobre las 20.45 horas, cuando agentes uniformados de la Brigada Local de Seguridad Ciudadana realizaban un dispositivo de identificación en una rotonda en la avenida Juan Vargas, en el núcleo poblacional de San Pedro Alcántara.
En esta situación, la Policía dio el alto al conductor de un automóvil, que llegó a detener el vehículo y a entregar su documentación a uno de los agentes.
El conductor pisó a fondo el acelerador y emprendió la huída, realizando un zigzag entre los vehículos que circulaban en ese momento por la vía, poniendo así en riesgo a los usuarios de la misma.
De inmediato, una furgoneta policial situada en zona de reacción del control inició la persecución, tomando la delantera al automóvil a la fuga tras atajar por una isleta, bloqueándole finalmente el paso.
Pese a ser un punto de la vía con buena visibilidad y que la patrulla llevaba los dispositivos de señalización activados, el conductor del referido coche terminó embistiendo a la furgoneta policial, quedando ambos vehículos inutilizados.
Por último, los ocupantes del coche abrieron las puertas y llegaron a salir del mismo con la intención de echar a correr, ofreciendo resistencia al arresto.
Según las diligencias realizadas, dos de los ocupantes cuentan con numerosos antecedentes policiales, ganando fuerza la hipótesis de que creyeran tener una reclamación judicial en vigor, tratando así de eludir el control.