El sector de la construcción en la provincia de Málaga tiene sobre sí un nuevo motivo de preocupación. Si hace apenas una semana era el alza de los precios de las materias primas lo que provocaba la alarma, ahora es la escasez de mano de obra cualificada capaz de hacer frente a la senda de crecimiento que tienen en los últimos meses la obra privada y pública en este territorio.
Asumida la dificultad de poder establecer porcentajes de demanda, la patronal sí apunta como probable que a corto y medio plazo, de mantenerse la línea ascendente actual, las empresas necesitarán "un 20% más de trabajadores que en la actualidad".
Y esto, tomando como punto de partida los alrededor de 64.000 empleos directamente vinculados a la construcción malagueña, implica la incorporación de unos 14.000 nuevos operarios.
"Es verdad que no se está parando obra por falta de personal, pero ya está en el aire que hay dificultades", señala la secretaria general de la Asociación de Constructores y Promotores (ACP) de Málaga, Violeta Aragón. Habla de que hay empresas asentadas en la provincia que acuden a otros territorios con menos actividad en busca de personal, e incluso a países del extranjero. Entre otros, a Marruecos y países africanos.
Conforme a los detalles que aportan un gran número de empresarios, ya existen problemas para encontrar determinado personal. "Si eso es a día de hoy, hay que pensar en lo que pueda ocurrir en el momento en que sector siga creciendo, que es lo esperado, y puedan llegar los fondos europeos", expone.
El escenario futurible del que habla Aragón no es para nada descabellado. Desde que arrancó el año, según los datos publicados por el Colegio de Arquitectos, se han visado unas 4.000 viviendas y se han terminado 6.018.
Las previsiones apuntan a que estos registros irán al alza con la mejora de la economía. Un factor al que sumar la intención del Gobierno de activar varias líneas de financiación directamente ligadas a la rehabilitación y a la eficiencia energética de inmuebles ya consolidados. Una doble oportunidad que, en caso de confirmarse, requerirá de una mano de obra de la que ahora no se dispone.
El escollo con el que se topan los empresarios no se relaciona sólo con el número sino con la cualificación de ese personal. Sobre ello, Aragón llama la atención en que las líneas de formación educativa no son las adecuadas. "La FP Dual no está funcionando correctamente en esta materia, no se está desarrollado en España y habría que trabajar en formar a gente porque si no lo que pasa es que cuando necesitas ciertos oficios no los encuentras", destaca.
Esta circunstancia viene a sumarse al hecho de que muchas cuadrillas especializadas han dejado de trabajar para otras constructoras, en forma de subcontrata, y han optado por asumir directamente encargos en actuaciones de rehabilitación de edificios. Si bien las necesidades son amplias, alude directamente a oficios como los de encofrador, los encargados de hacer estructuras y los colocadores de pladur, entre otros.