Detenido por tener casi 200 plantas de marihuana y numerosas armas blancas en un piso de Málaga

Agentes de la Policía Nacional han detenido en Málaga a un hombre, de 36 años, por su presunta implicación en los delitos contra la salud pública y defraudación de fluido eléctrico, después de desarticular en su domicilio de la Cruz Verde un invernadero con 196 plantas de marihuana en avanzado estado de crecimiento --cada planta medía 1,20 metros aproximadamente--.

En el registro realizado en el piso del sospechoso, los agentes intervinieron, además de la plantación y la logística de este tipo de cultivos, numerosas armas blancas, en concreto una decena de machetes, puños americanos, navajas, unos grilletes y hasta un hacha, por lo que fue arrestado, además, por quebrantar una medida cautelar de prohibición de tenencia de armas, emitida por el Juzgado de lo Penal número 14 de Málaga, en relación con una detención anterior por un delito de malos tratos en el ámbito familiar.

La investigación por el desmantelamiento del invernadero de marihuana, que ha sido llevada a cabo por agentes adscritos al grupo de investigación de la Comisaría de Distrito Centro, se inició a partir de unas informaciones que apuntaban a un cultivo de marihuana en un piso del centro.

Las pesquisas de los investigadores pronto surtieron efecto, comprobando como efectivamente la vivienda que albergaría la plantación desprendía un fuerte olor a cannabis. Otro elemento objetivo que alimentaba las sospechas de los agentes era el funcionamiento constante, las 24 horas del día, de unos aparatos de aire acondicionado y unos motores.

Al frente de la plantación estaba un ciudadano de unos treinta años, quien figuraba empadronado en el piso y que contaba con antecedentes policiales por hechos de distinta naturaleza.

Una vez motivada la diligencia de entrada y registro, que fue autorizada por el Juzgado de Instrucción número 8 de Málaga, la Policía Nacional accedió al inmueble e intervino 196 plantas de cannabis sativa, arrojando un peso, una vez cortadas, de 39 kilogramos, cuyo valor en el mercado ascendería a unos 200.000 euros.

Asimismo, los agentes incautaron 20 lámparas y otros tantos condensadores eléctricos, utensilios para el cultivo y una quincena de armas blancas, de diferentes tamaños, entre otros efectos.

Finalmente, el investigado resultó detenido por su presunta participación en delitos de tráfico de drogas, defraudación de fluido eléctrico, al confirmarse que el invernadero permanecía conectado de forma fraudulenta a la red, y quebrantamiento de prohibición de tenencia de armas.