La búsqueda de agua continúa en Málaga. La Empresa Municipal de Aguas de la ciudad de Málaga (Emasa) quiere utilizar el agua subterránea del metro de Málaga para el riego de jardines y el baldeo de calles. Por ello, el consejo de administración de Emasa tiene previsto aprobar un acuerdo transaccional con Metro de Málaga que les permitirá usar este agua para ello.
Asimismo, el Consistorio, a través de un comunicado, ha explicado que la empresa municipal y la entidad concesionaria de la Junta han trabajado de manera conjunta para encontrar una solución técnica que les permita utilizar estos recursos hídricos.
El objetivo de este acuerdo es que el agua que acaba en la red de saneamiento pueda utilizarse para el riego de parques y jardines de toda la ciudad y también para el baldeo de calles. De esta forma, la capital dispondría de un recurso alternativo más ante la situación de sequía.
Además, también buscan que este volumen de agua deje de ser vertido a las redes de saneamiento y, en su lugar, sea trasladado hasta la depuradora de aguas residuales del Guadalhorce para su tratamiento, con los consiguientes gastos de explotación y mantenimiento.
Esta actuación se complementará con otra encaminada a reconducir la evacuación de aguas pluviales del suburbano a varios puntos de la red de alcantarillado público para evitar que puedan colapsar en caso de fuertes precipitaciones.
1.550 metros cúbicos de agua al día
Cabe señalar que estas aguas subterráneas podrían llegar a aportar un caudal mínimo de 1.550 metros cúbicos al día, que sería destinado al riego de zonas verdes, a la limpieza viaria y a cualquier otro uso permitido con agua no potable. Con este volumen, que se sumará a los recursos ya disponibles, se podrían regar el 15% de los parques y jardines públicos de Málaga.
Así, Metro de Málaga financiará las obras y asumirá el mantenimiento de las instalaciones tanto para el aprovechamiento del freático como para bombear las aguas pluviales. Su presupuesto ronda los 528.244 euros.
Además, el Consistorio construirá dos depósitos para almacenar este volumen de agua, cuyo coste asciende hasta los 362.474 euros.
Una vez que el acuerdo sea aprobado por los consejos de administración de Emasa y Metro de Málaga, será refrendado por el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, y la consejera de Fomento, Rocío Díaz.
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