Unas pocas horas es lo que ha estado viudo el banquillo del Málaga CF. Después de las llegadas de José Alberto López y Natxo González esta misma temporada con más pena que gloria, a ocho jornadas del final es el turno de Pablo Guede. El tercer cambio en un mismo año, es más, en poco más de tres meses. Así que la dirección deportiva se encomienda al argentino para que el equipo confirme cuanto antes la permanencia del equipo malacitano en LaLiga SmartBank.
Tal y como ha comunicado el club, el nuevo entrenador firma por lo que resta de temporada en Segunda División y por un año más de contrato. Ya estuvo en la pugna por venir tras la destitución del técnico asturiano, pero en aquel entonces tenía contrato con otro equipo. Así que ahora, tan esperado por la afición, será el encargado de resucitar a la plantilla para luchar por esa salvación que se ha ido complicando con el paso de las jornadas. Además, uno de los puntos positivos es que también juega con el sistema 4-4-2. Por lo que la adaptación, en ese sentido, necesitará de menos recorrido.
A pesar de no ser especialmente conocido por sus experiencias como primer entrenador, sí que le ocurre por ser uno de los héroes de la historia malaguista. Allá por la temporada 97/98, Pablo Guede fue el responsable de que el conjunto de Martiricos ascendiera a Segunda División tras la goleada al Terrasa en La Rosaleda, el que ahora será de nuevo su estadio.
No cuenta con excesiva experiencia en los banquillos españoles. Solo ha entrenado al CD El Palo en Tercera con un ascenso a Segunda División B en España. Sin embargo, la vida le condujo de nuevo hacia su tierra natal. Allí entrenó al Nueva Chicago, al CD Palestino de Chile, al reconocido San Lorenzo de Almagro (uno de sus sueños, tal y como él mismo expresó) y volvió otra vez a Chile para coger los mandos del Colo Colo.
No obstante, en la temporada 18/19 cambió de continente para probar en el Al-Ahli Jeddah de Arabia Saudí. Un par de meses después regresó a Latinoamérica para desembarcar en Chile con el Monarcas Morelia y sus dos últimos equipos han sido el Club Tijuana y el Necaxa, ambos en México. Sin embargo, de este final fue destituido en el mes de febrero, pocos días más tarde de que fuera cesado en la Costa del Sol el propio José Alberto López. Entre los títulos que engrosan su palmarés destacan la Supercopa Argentina (15/16) y el bicampeonato en la Supercopa de Chile (16/17 y 17/18).
Ahora el reto que afronta es uno de los más duros que ha tenido durante toda su carrera como entrenador. Las noticias son menos malas tras la victoria del Alcorcón sobre la Real Sociedad B (2-4). Los jugadores de Xabi Alonso recibieron dos tarjetas rojas en la primera parte y eso condicionó notablemente el desarrollo del partido durante la segunda mitad. Aunque lo cierto es que habrá que esperar un poco más para saber el colchón definitivo. Si el Fuenlabrada le ganara el próximo lunes al Leganés, pasaría a ser de cinco puntos.
El Málaga CF tiene que afrontar aún las visitas a los estadios de Leganés, Las Palmas, Tenerife y Lugo (la última jornada). Mientras que La Rosaleda deberá recibir a Valladolid, Eibar, Real Oviedo y Burgos. Ahora bien. El desafío no solo será futbolístico, sino también anímico para recuperar a una plantilla que ha recibido tantos palos en los últimos partidos.
Su suerte será la del Málaga CF y la necesita.