Sergio Pellicer llegó a finales del pasado mes de enero para sacar al Málaga CF de los puestos de descenso, en los que lleva toda la temporada. El de Nules cogió las riendas a cuatro puntos de la permanencia, y ahora, poco más de un mes después, está a diez. Esa es la cruda realidad del equipo de Martiricos, que se aferra a las matemáticas para evitar el naufragio, pero estas le dan la espalda jornada tras jornada.
El Málaga CF arrancó la temporada con Pablo Guede en el banquillo, que solo se mantuvo en el cargo seis jornadas tras los malos resultados y un estilo de juego sin pies ni cabeza que acumuló varios bochornos en pocos encuentros. En esos seis partidos, el Málaga solo sumó tres puntos de la victoria a domicilio contra el Mirandés. El resto fueron derrotas, cero puntos en La Rosaleda. El Málaga encajó doce goles en ese periodo y metió cinco.
A Guede lo sustituyó Pepe Mel, que le lavó la cara al equipo, pero no pudo frenar los errores individuales que fueron condenando al conjunto blanquiazul jornada tras jornada. En sus seis primeros partidos, los números del madrileño fueron los mejores en la comparativa de los tres técnicos que ha tenido esta temporada el Málaga. Seis puntos en seis partidos merced a tres empates, una victoria y dos derrotas. La cifra de goles encajados se redujo a cinco, aunque solo se transformaron cuatro. Esa mejora sustancial no le sirvió a Mel para sacar al Málaga del descenso.
Tras el dramático partido del pasado domingo contra el Racing de Santander, Pellicer cumplió seis partidos en el banquillo malaguista. El Málaga CF está peor, bastante peor, desde entonces. Es un equipo que se mantiene con vida con la respiración asistida que dan las matemáticas. Que hablan más bien de un milagro.
En estos seis partidos, el Málaga CF ha sumado cuatro puntos, fruto de un empate en Gijón y la victoria contra el Real Zaragoza. Se han marcado cinco goles a favor y se han recibido seis. Eso ha condenado al Málaga, unido a la mejora de rendimiento de otros equipos como el Racing de Santander, a estar más lejos que nunca de la permanencia. Son diez puntos los que separan al Málaga del milagro que tendrá que obrar en las próximas doce jornadas, donde necesitará más victorias de las cinco que lleva en todo el curso. Unos números de Primera RFEF que Sergio Pellicer tampoco ha podido corregir.