Avance en la planificación, frenazo en los juzgados

Está asimilado, en el Málaga CF y el malaguismo, que el camino a recorrer desde que se certificara el descenso en Mendizorroza iba a ser largo y duro. La paciencia iba a pasar a ser la virtud que tenía que desarrollar todo lo que rodea al club por encima de cualquier otra. Esta semana ha sido una buena prueba de ello. Por un lado, ha llegado el primer fichaje y se ha aclarado la continuidad de algunos jugadores. Por el otro, la causa contra los Al-Thani se ha paralizado. 

La semana arrancó con la presentación de Dioni como nuevo jugador del Málaga CF y con la confirmación de que Genaro y Juande continuarían en el club, mientras que se trabajaba en la salida de Manolo Reina. Carlos López será el segundo portero del equipo. También se descartó, Loren, la continuidad de Alberto Escassi en las filas blanquiazules. 

Este jueves se cerró también de manera definitiva otro asunto que había abierto, el de Lago Junior, que se ha decantado finalmente por irse al Racing de Santander y no aceptar la oferta del Málaga. De esta forma, las tres apuestas del club para que continuasen como pilares del equipo, Rubén Yáñez, Castro y Lago, han sido fallidas. 

La instrucción contras los Al-Thani, paralizada

Con mucho camino por recorrer pero con el panorama algo más despejado en lo deportivo, donde todo apunta a que no se terminará nunca es en los juzgados. La jueza del caso Al-Thani, María de los Ángeles Ruiz, ha suspendido la instrucción, a la espera el cierre para decidir si se va a juicio o no. El abogado marbellí Dumet Grayeb presentó una querella contra Ruiz por prevaricación. 

La motivación de Grayeb es que la jueza no le reconoce la acción que tiene del Málaga Club de Fútbol, lo que le impediría mantenerse como parte personada en el caso contra los Al-Thani.

Por ello, Ruiz ha decidido suspender la instrucción a la espera de que el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía decida si admite o no la querella. 

Esto es una piedra más en el camino de un proceso que se puede extender a los cuatro años y que tiene al Málaga atado de pies y manos, con una administración judicial cuyo resultado hasta ahora ha sido acabar con el club sin riesgo de desaparición pero con el equipo en Primera RFEF, fuera del fútbol profesional. 

El verano va a ser muy largo.