Vuelve el Trofeo Costa del Sol. Lo más viejos del lugar, socios del CD Málaga y ahora continúan con el Málaga CF, tendrían marcado en el calendario un día como el de este sábado en La Rosaleda. Volvía el fútbol, se presentaba el equipo ante su público en las viejas gradas del estadio de Martiricos, con las caras bronceadas del verano y el olor a mar de la Málaga de estos días de agosto. Aunque lo que se viva esta noche en el estadio blanquiazul tendrá poco que ver con la pompa que otros días tuvo esta cita para los malaguistas.
El Málaga CF se medirá al Antequera a partir de las 20.30 horas en la que será la XXXIV edición de este trofeo que no se celebraba desde el verano de 2017, cuando el SS Lazio se impuso 1-0 al Málaga que, sin saberlo, aunque a lo mejor adivinarlo, empezaba a escribir su peor etapa desde la nueva denominación tras la desaparición del CD Málaga. Al final de ese curso se fue a Segunda División hasta llegar a la actualidad, donde una serie de despropósitos los niveles lo han llevado fuera del fútbol profesional tras el descenso de la temporada pasada, en la que no fue capaz de estar más de dos jornadas fuera de los puestos de descenso.
Cuando se barruntaba el desastre, el nuevo director general del club, Kike Pérez, empezó a diseñar lo que iba a ser el nuevo Málaga CF y una de las decisiones fue la de recuperar el Trofeo Costa del Sol. La idea inicial era contar con alguno de los numerosos equipos extranjeros que preparan la temporada en la Costa del Sol o en Andalucía, principalmente italiano, pero finalmente se ha tenido que recurrir al que será el gran rival del Málaga esta temporada, el Antequera CF, que tras una brillante temporada en Segunda RFEF, este año compartirá categoría con los blanquiazules para vivir un derbi malagueño en partido oficial veinticinco años después. Los antequeranos también han tenido dificultades para hacer un hueco a este otrora ilustre trofeo.
Pero esta noche la pelota volverá a rodar en La Rosaleda para buscar un ganador de una copa que el Málaga ha levantado diez veces desde 1961, cuando se celebró por primera vez. En quince ocasiones ha sido subcampeón entre todos los formatos que han tenido lugar a lo largo del tiempo: cuadrangular, triangular y partido único.
Además del Málaga, hay otros 20 equipos que han levantado el trofeo, el Athletic Club, el Sevilla, el Barcelona, el Real Madrid y el Espanyol son los otros españoles en conquistarlo.
El Málaga CF intentará el asalto a su undécimo entorchado en un ambiente enrarecido, con la afición con el ceño fruncido por los últimos años del equipo, aunque con 12.500 abonados para el próximo curso. Con un equipo al que le faltan todavía piezas por llegar y en el que falta por saber qué jugadores del filial terminarán de formar parte de la primera plantilla.
Se ha vivido una semana previa agitada en las oficinas de La Rosaleda para avanzar la planificación con dos salidas dolorosas para la afición, al de Álex Calvo y Cristian, con una llegada frustrada en el último momento como la de Zé Ricardo, y con la llegada del extremo Juan Hernández.
El equipo del que tire Sergio Pellicer será muy parecido a la base con la que arranque el campeonato el 26 de agosto en Castalia contra el Castellón, con una columna vertebral configurada con los fichajes que han llegado hasta el momento: Alfonso Herrero, Jokin, Galilea, Juanpe, Sangalli y Dioni, un malagueño que esta noche cumplirá su sueño de debutar en La Rosaleda con la camiseta del equipo de su ciudad.
Habrá una baja destacada como es la de Ramón, llamado a llevar la manija del equipo si la salud, las lesiones, lo respetan, y que no ha podido entrenarse con el resto de compañeros en toda la pretemporada.
Sea como fuere, vuelve el fútbol a La Rosaleda con una cita señera para los aficionados malaguistas, la que debe ser el pistoletazo de salida de la redención que el club le debe a los suyos.