Si hay un partido para medir realmente por dónde respira la Primera RFEF, ese puede ser casi con toda seguridad el que afronta el Málaga CF esta tarde de domingo en Linarejos contra el Linares Deportivo, uno de los equipos más competitivos de la categoría de bronce del fútbol español y en uno de los estadios más complejos de abordar en todo el campeonato. El de Linares se ha convertido en un choque de más de tres puntos en juego, será un partido de marcar territorio, de comprobar si los de Martiricos están ya preparados para la batalla que les espera de aquí a mayo, un choque, en palabras de Sergio Pellicer, que "va a decir mucho".
La cita será este domingo 24 de septiembre a partir de las 18:00 horas (FEF TV), enmarcada la quinta jornada del Grupo 2 de Primera RFEF entre dos equipos que, según los resultados, se encuentran en un buen momento.
El partido estará marcado sin ninguna dura por el apoyo masivo que tendrá el Málaga en Linarejos, hasta donde se desplazarán más de dos mil malaguistas que están recibiendo un trato excelente por parte del club local, volcado en el desembarco blanquiazul en la ciudad jiennense.
El Málaga llega al partido inmerso en una racha de tres victorias consecutivas que hacía mucho tiempo que no se paladeaba en Martiricos, y tercero en la tabla aunque con un partido más que el Ibiza. Son nueve puntos de doce posibles los conquistados por lo de Sergio Pellicer.
Para sumar la cuarta y los doce puntos tendrá que arremangarse y dar su mejor versión, tal y como apuntó el de Nules en la previa del partido, que se ha llevado a toda la plantilla a Linares, incluidos los lesionados Ramón y Haitam. Huele a partido gordo.
El once
Pellicer respondió a una pregunta sobre el once con otra pregunta: "¿He repetido algún once?", dijo antes de dejar caer que podría haber algún cambio. Así que conociendo los precedentes -la sorpresiva suplencia de Dani Lorenzo contra el Recreativo Granada, por ejemplo- es complicado acertar por dónde le meterá mano el entrenador del Málaga a su equipo en Linares.
Una de las novedades puede ser Einar Galilea para ganar contundencia en el centro de la defensa, o la entrada bien de Manu Molina, bien de Dani Lorenzo en el centro del campo, y la inclusión de Juan Hernández en uno de los extremos después de su gran gol el pasado sábado en La Rosaleda.
Parecen fijos Alfonso Herrero en la portería, Nelson Monte en el centro de la defensa y Gabilondo y Víctor García en los laterales, Genaro en el pivote, Sangalli después de su gran actuación en el interior y Dioni y Roberto arriba. Se antoja complicado que pueda rotar Kevin tras su despliegue contra el filial del Granada.
El rival
Un playoff y solo a falta de un gol para otro. Esa es la carta de presentación del Linares en las dos temporadas anteriores, las dos de la corta historia de la Primera RFEF. Con un equipo que no está construido para ello, el conjunto jiennense se ha convertido en uno de los rivales más rocosos de la categoría, que exigen el máximo del contrario, especialmente en su estadio, para sacar los partidos adelante.
Tras un arranque gris de temporada, los azulinos llegan de dos victorias que dan lustre en los dos últimos partidos. Una en Linarejos contra el Real Madrid Castilla, y la otra en El Nuevo Arcángel contra el Córdoba.
Pellicer describió al equipo del Linares como un conjunto que aprieta mucho cuando no tiene el balón y que te empuja hacia tu área cuando tiene la pelota, especialmente en su estadio. Además, peligroso a balón parado.
En el banquillo del Linares está recién aterrizado Óscar Fernández, que hasta el momento mantiene al conjunto linarense igual de competitivo que lo era con el coineño Alberto González, que dejó huella en Linarejos. El 1-4-2-3-1 es el sistema que emplea Fernández, procedente del Almería B, para disponer a los suyos sobre el césped.
En la portería del Linares Deportivo está Samu Casado, viejo conocido de Sergio Pellicer, guardameta de la generación juvenil que se convirtió campeona de España en Vera a las órdenes del de Nules.
Hay que remontarse a la refundación del Málaga CF, en la temporada 94-95, para encontrar un precedente de un partido oficial entre estos dos equipos, cuando entonces militaban en el Grupo 9 de Tercera División. En abril del 95, Linares y Málaga empataron a cero en Linarejos.
Manuel García Gómez, del colegio extremeño, será en el encargado de dirigir un partido que a pesar de lo temprano de la fecha se ha convertido en troncal para los de Pellicer, para comprobar de qué madera están hechos y de si son capaces de disparar la ilusión del malaguismo, que peregrina tras los suyos.