Ángel Sánchez-Cañete, el hasta ahora entrenador ayudante de Unicaja, deja de formar parte del cuerpo técnico del equipo de cara a la próxima temporada. Tras haber empezado su andadura en el equipo en el curso 2001-02 de Boza Maljokovic, Cañete quiere afrontar un nuevo reto profesional, según ha informado el propio Club a través de un comunicado. 

A lo largo de estos últimos 23 años, Ángel Sánchez-Cañete ha formado parte de múltiples éxitos del club y ha trabajado con los entrenadores Boza Maljkovic, Paco Alonso, Sergio Scariolo, Aíto García Reneses, Chus Mateo, Luis Casimiro, Jasmin Repesa, Joan Plaza, Fotis Katsikaris e Ibon Navarro. 

Su trabajo le ha hecho convertirse en el entrenador principal o ayudante que más tiempo ha estado en el mismo banquillo acb y el que más tiempo ha estado nunca en el staff del Unicaja. 

Cañete lleva a sus espaldas la Liga acb de 2006, las Copas del Rey de 2005 y 2023, la Eurocup de 2017 y la BCL de 2024. También ha llegado a dirigir un partido como primer técnico del equipo en 2022 en Ucrania frente al Promotey. Esto le hizo pasar a ser el primer malagueño en hacerlo en el siglo XXI. Además, fue el cuarto malagueño en estar al frente del banquillo en un partido oficial, recogiendo el testigo de Alfonso Queipo de Llano, José María Martín Urbano y Pedro Ramírez.

Por otro lado, Javier Imbroda también se lo llevó a la Selección Española, donde trabajó con él de 2001 a 2003, ganando una medalla de bronce en 2001 y en 2003 la plata en el Eurobasket. 

Asimismo, desde Unicaja Baloncesto aseguran que “siempre será su casa” y agradecen “el trabajo, la dedicación y cariño de Ángel Sánchez-Cañete a lo largo de todos estos años en el Club y le deseamos lo mejor tanto a nivel personal como profesional en un nuevo paso de su brillante trayectoria”.

Por último, Ángel Sánchez-Cañete ha enviado una carta al Club que han dado a conocer y en la que explica que “después de más de media vida en el Unicaja, ha llegado el momento de despedirse del club de mi ciudad natal y de mi vida. Toca afrontar nuevos retos personales y profesionales que en este momento de mi carrera y mi vida me parecen únicos e irrenunciables”.

De igual forma, remarca que “títulos aparte, en estos momentos me quedo con las experiencias vividas, las buenas, las malas y las regulares, porque todas ellas han ayudado a formar el entrenador y a la persona que soy hoy en día”. Además, ha agradecido la confianza que Unicaja y también a los entrenadores, jugadores, técnicos y dirigentes “por haber sacado lo mejor de mí”. 

Entre sus letras también ha habido unas palabras para los aficionados cajistas: “sois vosotros los que hacéis que valga la pena ser de este club con vuestro apoyo”. “Sigo otro camino, pero Málaga y su baloncesto siguen estando donde siempre: mi corazón. ¡Nos vemos en el Carpena!”, ha zanjado.