La Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria, conocida como la Sareb o incluso como el banco malo porque se quedó con los activos tóxicos de las entidades financieras que naufragaron tras la explosión de la burbuja inmobiliaria, es pública y una de las mayores tenedoras de viviendas del país. Las comercializan a particulares o empresas, entre otros, y, según datos aportados a este diario, solo el año pasado vendieron 786 a familias andaluzas por un importe medio de 95.251 euros. 

La Sareb se quedó con todos esos suelos, pisos, garajes, oficinas, etcétera por los que las cajas de ahorro y algunos bancos concedieron una serie de préstamos que el promotor no fue capaz de devolver a partir de 2008, disparando la morosidad de esas entidades. El Gobierno, a través del FROB, las rescató entre 2009 y 2012 y los efectos aún colean.

La falta de vivienda es uno de los problemas más graves en Málaga, Andalucía y en el resto de España y está siendo uno de los platos fuertes en los programas electorales de los partidos de cara a las municipales y autonómicas del próximo 28 de mayo. El presidente del Gobierno, Pedro Sanchez, anunció el 16 de abril que se iban a poner 50.000 viviendas de la Sareb en alquiler a precios asequibles, de las cuales 21.000 se iban a ofrecer a comunidades autónomas y ayuntamientos. 

De esas 21.000 viviendas, la Sareb ya ha hecho un listado con 9.000 que están listas para ser vendidas y hay otras 12.000 qué aún están en proceso porque, por ejemplo, necesitan un certificado energético o porque sea necesario hacerle alguna reforma, con un plazo de ejecución de entre seis meses y un año. 

Estos inmuebles están vacíos, tienen licencia de primera ocupación y pueden comprarlos las comunidades autónomas y los ayuntamientos para potenciar sus planes sociales. Si no las quieren, pueden ser adquiridas directamente por particulares. 

En 2022, en Andalucía se comercializaron a particulares las 786 viviendas mencionadas anteriormente, lo que representó el 11% del total nacional. El mayor número de inmuebles vendidos a familias se produjo en la Comunidad Valenciana (1.642, el 22% del total), Murcia (837, 11%), Cataluña (805, 11%) y Andalucía. En total, la Sareb vendió 7.442 viviendas en España a particulares por un total de 728 millones de euros. 

Los datos de ventas a particulares a los que ha tenido acceso este diario son regionales. No obstante, según publicó EL ESPAÑOL de Málaga, la Sareb tiene 602 viviendas repartidas en 35 municipios de la provincia. En Málaga capital hay un centenar.