La apuesta del Ayuntamiento de Málaga por poner en valor y hacer visitables los importantes restos arqueológicos hallados en el sótano del Museo Thyssen, se atasca. El escollo con el que se topa ahora la Gerencia de Urbanismo, tras años de estudios y trabajos previos, se localiza en la ausencia de empresas dispuestas a acometer los trabajos necesarios en el subsuelo por el precio fijado en la licitación.

Así lo ha confirmado a EL ESPAÑOL de Málaga el concejal de Ordenación del Territorio, Raúl López, quien ha precisado que las firmas a las que se ha consultado son reticentes a afrontar la actuación con unos costes calculados hace unos seis meses.

Se trata, pues, de un ejemplo más del impacto negativo que está teniendo sobre el sector de la construcción y sobre las licitaciones públicas el incremento de los costes de los costes de los materiales del sector.

Ante este problema, López informa de que se va a proceder en los próximos días a realizar una revisión de los precios, ajustando de este modo el proyecto de intervención a la nueva realidad, procediendo después a activar otro proceso de licitación.

Hay que recordar que el contrato que ha quedado desierto fijaba un presupuesto inicial de 321.413,24 euros, con un plazo de ejecución de las actuaciones de 8 meses. Esto permitía atisbar la posibilidad de que a mediados del año de 2023 se abriese a la visita del público los restos encontrados. 

El objetivo de la operación es garantizar su protección, así como su conservación y difusión. Las excavaciones realizadas en su día, en el marco de construcción del actual museo, sacaron a la luz piezas de lo que era una antigua villa romana, piletas de salazones de pescado y, sobre todo, de un ninfeo (una fuente) decorado de peces (varios atunes, un voraz, entre otros) y paneles pintados.

Durante el proceso de redacción del proyecto, Urbanismo solicitó al Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) un informe de adecuación de las futuras visitas a las condiciones de preservación de los restos arqueológicos existentes para que se mantengan las condiciones de humedad y temperatura necesarias para los mismos.

Conforme a los planteamientos realizados, estas visitas y rutas, con el fin de garantizar la conservación de este espacio, se organizarán en función del tiempo y del número de usuarios que participen en las mismas.

La adecuación arquitectónica del sótano del Museo Carmen Thyssen comprende la adaptación y la mejora de las instalaciones existentes de iluminación, climatización y protección contra incendios, la ejecución de una pasarela que permita recorrer los restos, el refuerzo de la estructura existente cuando sea necesario, así como el revestimiento y la pintura de los paramentos horizontales y verticales del sótano arqueológico.

Actuaciones previstas

Entre las actuaciones previstas está la creación de un recorrido accesible para la contemplación del yacimiento, que se inicia en una plataforma de recepción y concluye en una segunda plataforma de carácter expositivo.

Ambas se conectan por una pasarela cuyo recorrido permite una contemplación de los restos in situ. Comprende actuaciones de adecuación puntual de la estructura para posibilitar la colocación de determinados tramos de pasarelas.

En aquellas zonas donde existen elementos que impiden aproximarse a los restos se plantea un techo suspendido de acero inoxidable pulido cuyo efecto espejo permitirá a los visitantes tener una visión cenital complementaria desde la propia pasarela. 

Se incluye la ejecución de revestimientos, acabados e iluminación adecuados para convertir el sótano arqueológico en una sala más del discurso expositivo del museo. Y se dotará de medios conforme a las exigencias básicas de seguridad en caso de incendio.