¿Cómo se va a desarrollar la gran obra del nuevo tejado de la Catedral de Málaga? La pregunta ya tiene repuesta. Las empresas que se han hecho con el millonario contrato de construcción de la cubierta a dos aguas se han puesto manos a la obra y han generado un video mediante el que precisar fase a fase la operación.
La alianza de Hermanos Campano y Grupo ORP incluyeron este producto audiovisual en su oferta, que eleva el coste a 12,9 millones (sin IVA), siendo el plazo estimado de unos 28 meses. En la pieza audiovisual, se destaca que serán tres las zonas de intervención sobre el templo.
En el caso de la cubierta superior, se prevé la práctica de una cubrición inclinada basada en la solución de Ventura-Rodríguez que protegerá del agua de lluvia el plano superior, estableciendo un correcto sistema de impermeabilización y de recogida de aguas.
En el espacio creado bajo cubierta se prevé un nuevo recorrido para la contemplación y musealización del trasdós de las bóvedas. En las cubiertas intermedias construiremos una nueva cubierta a la catalana sobre las naves laterales y la girola.
Para la sacristía se tiene prevista una cubierta de cuatro aguas. "Para la ubicación de los medios auxiliares, ocuparemos provisionalmente parte de la calle Postigo de los Abades; comenzaremos con el montaje del vallado y resto de las instalaciones que nos permitirán el acceso y movimiento de cargas a las diferentes áreas de actuación", exponen.
El proyecto prevé la instalación de dos grúas, una cimbra para posibilitar la instalación de un elevador de personas, escalera y casetas y zona de taller para premontaje de la estructura de madera. En la zona norte y sacristía será necesario el apoyo de grúas móviles o, como alternativa, una tercera grúa torre fija.
Vista de la Catedral de Málaga con el nuevo tejado a dos aguas desde el mar.
Uno de los requisitos exigidos por la Diócesis a las empresas que participaron del concurso era que la calle Postigo de los Abades tiene que quedar desocupada en Semana Santa para instalar la rampa de acceso a los desfiles procesionales. Ante esta necesidad, las firmas señalan que en esas fechas será desmontado parte del vallado, disponiendo un control de accesos, seguridad 24 horas y detección térmica de incendios.
Para afrontar la cubierta superior, será preciso "simultanear trabajos de nueva construcción, demoliciones y restauraciones, teniendo que preservar la estanqueidad de los espacios bajo ella". Antes del izado de elementos, será precisa la demolición de la cubierta "a la catalana" de forma manual, por capas y sentido descendente de la piel cerámica, llegando hasta la lámina de plomo que garantizará la estanqueidad.
"Se continuará con la preparación de los soportes para las cerchas, el encofrado, hormigonado y curado de los apoyos de hormigón sobre los andenes, formeros y torales, así como la colocación de neopreno, placas metálicas y durmientes de madera en los andenes de fachada", agregan.
Al tiempo, los especialistas indican que todos los elementos estructurales vendrán tratados de fábrica, mientras que será en el taller a nivel de calle donde se ensamblarán las diferentes piezas mediante uniones atornilladas, configurándose conjuntos a elevar que no superen la capacidad portante de las grúas.
Segunda fase
"Asegurada la estanqueidad bajo la nueva cubierta iniciaremos la segunda fase de las demoliciones, retirada del impermeabilizante de plomo y restauración del trasdós. Simultáneamente, pero en el exterior, se procederá con los cerramientos verticales, revestimientos y acabados", precisan.
La colocación de la estructura comenzará por la Catedral Barroca, trabajando por crujías completas. Continuaremos por la girola y cruceros norte y sur, finalizando con el cierre de la estructura principal. Una vez cubierta la superficie completa por la zona libre del crucero, se introducirán la estructura para las escaleras, plataformas y pasarelas interiores.
Vista de la Catedral de Málaga.
Cubiertas intermedias
Para intervenir en las cubiertas intermedias, las tareas arrancarán por la terraza sur, en sentido de oeste a este. "Lo haremos por terrazas completas, lo que facilita una correcta impermeabilización. Extenderemos lonas en caso de lluvia. Terminaremos en la girola, trabajando por tramos que coincidirán con las juntas de dilatación", añaden.
Los trabajos previstos para la nueva cubierta de la sacristía se practicarán a la par que la estructura de la cubierta superior, pero en este caso la demolición y restauración se realizarán previamente y de manera completa. También se protegerá la zona de actuación en caso de lluvia con lonas impermeabilizantes antes del izado de la estructura.
El proyecto presenta, asimismo, la posibilidad de mantener las visitas turísticas a las cubiertas de forma limitada y fuera de nuestro horario laboral, siempre garantizando la total seguridad de los visitantes y de acuerdo con las indicaciones del coordinador de seguridad