Si tuviésemos que levantar la patita al Metro de Málaga con el objetivo de determinar el sexo de la criatura, llegaríamos a la firme conclusión de que su ADN es esencialmente masculino. Y no porque los metros o tranvías tengan género asignado, sino porque quienes trabajan en el día a día para hacer posible su funcionamiento son, en gran mayoría hombres.

Lejos de los estándares ideales, el suburbano malagueño está compuesto principalmente por varones. Una situación que, con ligeras variaciones, se ha mantenido en el tiempo desde el origen mismo del proyecto. Los datos objetivos, aportados por la entidad explotadora del ferrocarril urbano, Metro de Málaga, no dan lugar a la duda.

Los más recientes, que se pueden consultar en las cuentas anuales de la firma, corresponden al año 2022. Atendiendo a los mismos, la explotación comercial del Metro malagueño necesita de una plantilla integrada por un total de 160 empleados. De ellos, 128 son hombres; 32, mujeres. Esto implica que el 80% son varones, frente a apenas un 20% de féminas.

Esta evidente disparidad no es nueva. Se mantiene en el tiempo desde hace años. A modo de ejemplo, los datos de la plantilla de 2019, cuando el Metro llevaba unos cinco años en servicio. Durante ese ejercicio trabajaron en la infraestructura 141 personas. De ellas, 115 eran hombres y 26 mujeres. Los parámetros se mantuvieron idénticos en 2020 y crecieron en 2021. Ese año eran 150 los nombres que integraban la plantilla de Metro de Málaga, de los cuales 122 eran masculinos y 28 femeninos. 

De las diferentes secciones recogidas en la plantilla, donde mayor es la desproporción de sexos es en la parte de dirección. Los cuatro puestos que hay incluidos en la plantilla están ocupados por hombres. Y así es desde hace años. La otra cara de la moneda corresponde a las funciones de comercial, administración y servicios generales, donde predominan las mujeres. En 2022, de un total 22 trabajadores, 14 eran mujeres frente a 8 hombres.

¿Qué ocurre, por ejemplo, con los conductores de los trenes? En el apartado de operadores de línea, el año pasado había trabajando en Metro de Málaga 85 personas, de las cuales 71 eran varones y 14 mujeres. Si bien es cierto que la cifra de féminas duplica a la que había en 2019, cuando eran solo 7 las operadoras de línea, el aumento es incluso mayor en el caso de los varones, con 10 más respecto a ese mismo ejercicio.

Gwenola Chandon, una de las dos integrantes del Consejo de Administración de Metro de Málaga.

Esta realidad, avalada por los números objetivos, tiene traslación igualmente al centro de decisiones de todo cuanto ocurre en el gran proyecto del suburbano, el Consejo de Administración de Metro de Málaga. El órgano, mayoritariamente controlada por el fondo francés Natixis (la Junta mantiene casi un 23,7% del accionariado), cuenta con un total de nueve integrantes, de los cuales dos son mujeres: Gwenola Chambon y Anne-Sophie Marie Leurent.

64% de usuarios eran mujeres

Resulta cuando menos paradójica el reparto de sexos en la plantilla cuando, según la memoria del Metro de los años 2019, 2020 y 2021, en estos dos últimos ejercicios el 64% de los usuarios eran mujeres

En este mismo informe de sostenibilidad, la empresa destaca que aunque en 2021 el 81,33% de la plantilla eran hombres, "cabe señalar que en el Grupo I, donde se encuentran clasificados los puestos de jefaturas y asesorías, la proporción de mujeres es del 50%".

Incluso, hay un apartado sobre igualdad y conciliación de la vida personal, laboral y familiar. En el mismo se destaca la apuesta de la compañía por “generar un ambiente de trabajo seguro y saludable, rechazar cualquier tipo de discriminación, respetar el principio de igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres y todas las personas, garantizar el descanso del personal y la conciliación vida personal y profesional forman parte de nuestros compromisos”. 

De acuerdo con los datos recogidos, todos los trabajadores tienen derecho a un permiso parental en caso de nacimiento o adopción de un hijo, permiso del que en 2019, 2020 y 2021 disfrutaron 18 hombres y 7 mujeres. "Todas las personas que disfrutaron de este período de descanso se han reincorporado a su puesto de trabajo", se enfatiza. 

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