La millonaria rehabilitación del edificio de Hacienda en Málaga, algo más cerca: suma casi cinco años vacío
El Gobierno dio luz verde a finales del pasado mes de julio a la contratación de los trabajos, valorados en 28,4 millones y con dos años de plazo.
5 agosto, 2024 07:00Noticias relacionadas
Casi cinco años después de que echase el cierre y de que 600 empleados públicos abandonasen su interior, el Gobierno central allana definitivamente el camino para reformar el edificio de Hacienda. Por más que había amagado en los últimos meses con activar la contratación de los millonarios trabajos de adecuación del inmueble, que se levanta en la Avenida de Andalucía, no ha sido hasta finales del pasado mes de julio cuando ha liberado los fondos necesarios para impulsar el procedimiento.
Fue el pasado 23 de julio cuando el Consejo de Ministros autorizó la contratación de las obras de refuerzo de la estructura y reforma del complejo, que tiene un valor estimado de casi 28,4 millones de euros.
Este bloque, adscrito a la Agencia Tributaria (AEAT) y afectado a la Delegación de Economía y Hacienda, mantendrá su uso administrativo, concentrando en su interior las oficinas de Delegación Provincial de la Agencia Tributaria y a los servicios dependientes de la Delegación de Economía y Hacienda.
De acuerdo con los datos manejados por el Ejecutivo, el inmueble estuvo ocupado hasta diciembre de 2019, estando actualmente fuera de servicio debido a las patologías existentes, con daños en la estructura de los sótanos.
"La justificación de contratar las obras objeto del presente contrato obedece a la necesidad de acometer las obras de refuerzo y reparación de los elementos estructurales deficitarios observados en los estudios previos", remarca el Gobierno, que incide en que con esta operación se busca garantizar la estabilidad y seguridad del inmueble.
El calendario manejado por la Administración estatal concreta el inicio del contrato en 2025, siendo su plazo de ejecución de 24 meses. Conforme a estas previsiones, la terminación de los trabajos de adecuación no estarán completados hasta los primeros meses de 2027. De cumplirse esta previsión, los trabajadores que ahora están repartidos en diferentes sedes provisionales no regresarán al edificio ocho años después de ser desalojados.
Licencia desde mediados de 2023
Hay que recordar que el Gobierno ya tiene en sus manos la licencia de obras para acometer la rehabilitación. Fue en agosto de 2023 cuando la Gerencia de Urbanismo emitió el permiso necesario, estableciendo el presupuesto de ejecución material en unos 23 millones. El anteproyecto y el proyecto de ejecución fueron contratados a las empresas Cor Asoc. S. L. y Otxotorena Arquitectos S. L. P. U.
El edificio de Hacienda tiene una superficie construida de casi 22.800 metros cuadrados (de ellos, 12.761,22 se encuentran sobre rasante y otros 10.029,86 bajo rasante), repartidos en dos plantas sótano, una semisótano y once sobre rasante. Data del año 1980.
La salida forzosa de Hacienda, debido al mal estado del inmueble, obligó a alquilar varios emplazamientos alternativos, cuyo arrendamiento supone un coste anual cercano a los 2 millones de euros. Los contratos firmados por la Administración estatal y los propietarios de los inmuebles tienen una duración de 7 años, estando vigentes hasta finales de 2025. Atendiendo a los tiempos de la obra, todo hace indicar que será necesario ampliar temporalmente este vínculo contractual.
Los propios documentos técnicos destacan la existencia en el edificio de "deficiencias relevantes", destacando el proceso de "degradación" de las plantas sótano debido al efecto de la entrada de agua cada vez que se producía una inundación en la zona. Son relevantes las alusiones que se hacen sobre el incumplimiento de determinadas normativas de "obligado cumplimiento", caso a las condiciones de seguridad contra incendios y accesibilidad.
Otra de las actuaciones previstas es la modificación del acceso al garaje, buscando con ello evitar las afectaciones negativas que han tenido las inundaciones ocurridas en la zona. Se plantea la posibilidad de desplazar este acceso a la fachada oeste a una cota superior. A todo ello se suma la necesidad de ejecutar acciones para adaptar el edificio a las normativas actuales en materia de seguridad y accesibilidad.