"Me han dicho que abandone, pero es mi vida o un techo": Luisa Heredia continúa su huelga de hambre
En marzo consiguió paralizar el desahucio de la casa que ha ocupado durante 13 años, pero tiene ya fecha para un nuevo lanzamiento: el próximo 8 de mayo.
24 abril, 2023 16:33Noticias relacionadas
La malagueña Luisa Heredia dice sentirse "débil y agotada", pero tiene la determinación de seguir con huelga de hambre que comenzó hace una semana para exigir una vivienda digna para su familia frente a la amenaza de un desahucio previsto para el 8 de mayo.
"Me han dicho que abandone, pero es eso: mi vida o un techo", ha advertido la vecina del barrio Palomares, que continuará sin comer hasta que las administraciones le faciliten un piso para ella y sus cuatro hijos, tres de ellos menores.
En declaraciones a los medios frente al Instituto Municipal de la Vivienda de Málaga, Heredia ha explicado entre sollozos que los primeros días de ayuno le visitó un médico y "vio que tenía la tensión alta, pero lo iba llevando bien", aunque anteayer se puso "muy mala" y ahora se siente "débil y muy agotada".
Según la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH), la mujer ha sido atendida estos días por los servicios sanitarios por los efectos derivados de la ausencia de alimento y las analíticas han confirmado que su estado de salud "es delicado".
Heredia vive de un ingreso mínimo vital de 870 euros para ella y sus hijos, uno de ellos de ocho años con espina bífida, una enfermedad que afecta a la columna vertebral y puede provocar discapacidades físicas e intelectuales.
En marzo consiguió paralizar su desahucio de la casa que ha ocupado durante trece años de forma intermitente, pero tiene ya fecha para un nuevo lanzamiento el próximo 8 de mayo.
Según Heredia, desde el Instituto de la Vivienda le han dicho que van a negociar "con el fondo buitre" que es el propietario de la vivienda para tratar de obtener un alquiler social más acorde a la situación de esta familia vulnerable.
En 2014, tras el nacimiento de su hija y las complicaciones médicas que se generaron a raíz de su enfermedad, se le pasó el plazo estipulado para renovar la solicitud para la concesión de una vivienda de protección social que presentó en 2005, por lo que perdió la antigüedad que favorece en el sorteo de selección.
"Una vez que me echen tengo todo el tiempo libre del mundo, traeré un colchón y mi ropa y aquí me quedaré, mis hijos están bien", ha insistido Heredia, quien subraya que no se niega a pagar, pero necesita "ayuda".
La representante de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH), Mónica Pérez, ha afirmado que "Luisa es la punta del iceberg de un problema real" que afecta a miles de familias en España: "Ella pertenece a un perfil de familia vulnerable y debe tener el amparo de las instituciones".