Marta Cillán y Sara Giménez son las jóvenes detrás del proyecto Devermut, con un gran éxito en Instagram gracias a su activismo feminista que daba a conocer información relevante y de denuncia social a sus seguidores. Ahora, son ellas las que se encuentran en el foco de la polémica después de que el pasado viernes la pareja denunciase que, la noche anterior, habían sufrido una agresión homófoba en una discoteca de Conil, en Cádiz. Según ellas, fueron expulsadas del local por su orientación sexual. Según explicaban a través de varios stories de su cuenta, ambas fueron expulsadas tras encararse con varios hombres que las molestaron tras verlas besándose.
"Después de besarnos y tener a 200 maromos mirando, hemos avisado a los porteros, y lo que han hecho es decirnos que quizá habíamos bebido demasiado. Un portero bajito fuertote mazado hasta ha intentado pegarnos, el nivel ha sido fuertote", explicaban a sus seguidores.
Arden las redes
Hasta ese momento, las redes estaban de parte de las influencers, que relataron su historia. Sin embargo, horas después, el local Luna, contestó a través de redes sociales y publicó poco después un comunicado oficial avisando de que poseían varias imágenes de esa noche donde se podía demostrar que el relato de las Devermut era falso.
Los vídeos difundidos por el local resumen tres horas de grabación, que vienen acompañadas de los motivos por los que fueron expulsadas. El primero era por no respetar las medidas anti-Covid, el segundo por molestar a los clientes que están alrededor de ellas sin motivo alguno, y el tercero por utilizar malas maneras para dirigirse al personal del local que se acercó a ver lo que ocurría y las pidió que abandonasen el pub.
Hace apenas unas horas, la pareja de influencers compartía imágenes de local y un texto en respuesta a las últimas informaciones. "No hemos hablado durante estos días porque, realmente, no nos veíamos con las fuerzas para hacerlo. Están siendo días muy duros para nosotras. Lo que nos ha pasado a nosotras es lo que nos ha pasado a todas las mujeres alguna vez: sentir la intimidación, el acoso, o la humillación por parte de hombres en espacios públicos. Llevamos muchos años juntas de trabajo, esfuerzo y dedicación, buscando conseguir un mundo más justo para nosotras, y aunque a veces parece que todo está perdido, siempre hemos intentado dar aliento a las mujeres para no callar cuando somos víctimas de estas situaciones, de la mejor forma que hemos sabido hacer", escribían en el post.
"No creíamos que tuviéramos que dar explicaciones, pero en este caso no nos queda más remedio. Nosotras hemos tenido la suerte que no muchas tienen, y es que en el conjunto de vídeos publicados, se ve claramente como un hombre nos besa sin nuestro consentimiento, justo en el momento en el que le estábamos pidiendo que nos dejara en paz. Estas imágenes han sido omitidas de todos los vídeos que se han hecho virales. Esto es importante para mostrar que lo que decimos es cierto, y que lo que cuentan, es mentira. Esto ya está en manos de nuestros abogados, y por ello no haremos más declaraciones al respecto", continuaban, para después agradecer el cariño y apoyo que han recibido de parte de sus seguidores.
La comunidad LGBT responde
"Estas cosas nos pasan cada día a la comunidad LGBT. No nos habían echado nunca de una discoteca por lesbianas. 2021", escribían en un stories las influencers. Uno de los mensajes más criticados por la comunidad tras conocer los hechos reales, ya que podrían estar utilizando una problemática del colectivo para justificar sus hechos y "victimizarse".
Tras el visionado de las imágenes del local se contradice la versión de Marta y Sara. Sin embargo, muchos afirman que hay que tener en cuenta que no hay sonido en dichas imágenes, y además son un resumen con cortes que podrían contener material esencial para entender lo sucedido, como el nuevo vídeo compartido por ellas en el que se ve que uno de los hombres besa en la mejilla a una de las implicadas sin su consentimiento. Una conclusión que lo más probable es que se aclare en los juzgados, ya que el local ha anunciado que tomará acciones judiciales y demandará a Devermut por injurias y calumnias.
Por ahora, las Devermut han perdido alrededor de 70.000 seguidores en dos días, una cifra que sigue en descenso, aunque por ahora no se sabe cuál de las dos versiones es cierta.