Violencia de género en internet: 7 de cada 10 mujeres la han sufrido o han estado expuestas

Las mujeres, según Naciones Unidas, tienen 27 veces más posibilidades de ser atacadas en internet. De hecho, un 73% de mujeres en el mundo han estado expuestas o han experimentado violencia online, de acuerdo con un informe de ONU Mujeres.

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La magnitud de esta realidad no es menos importante en España donde, a pesar de  la escasez de estadísticas oficiales actualizadas, las investigaciones apuntan a una tendencia al alza, especialmente tras la llegada de la pandemia.

Para contribuir y visibilizar esta realidad, iMades Communication ha puesto en marcha la II edición de LIDEResA. Se trata del evento anual de la entidad que busca poner en valor el talento femenino y visibilizar aquellas situaciones que dificultan la consecución de una igualdad real.

El objetivo de la jornada, que tuvo lugar el  8 de febrero, fue contar con la experiencia y los conocimientos de expertos para que, desde el análisis del contexto social actual y en la era de la información, ayudaran a comprender cómo se articula la violencia de género digital, las causas que la provocan y el papel agravante que juegan plataformas como las redes sociales, además de poder escuchar de cerca testimonios de algunas mujeres que la han experimentado en primera persona.

En palabras de María Garzón, socia fundadora de iMades Communication: “La era digital y, especialmente, el auge de las redes sociales y la tecnología móvil, ha modificado el comportamiento de los seres humanos. La interacción social de nuestros días se ha trasladado en gran medida al mundo online: así, la ‘socialidad conectada’ es un hecho que se consolida. Pero, ¿cómo afecta esta alta exposición al medio digital a las mujeres, las cuales ya sufren de por sí violencia en el mundo real?”

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Para dar respuesta al interrogante, se organizaron una mesa redondas y tres ponencias en las que participaron representantes de organismos oficiales, investigadoras y comunicadoras que trabajan en el conocimiento y prevención de la violencia de género digital.

¿Espacio seguro?

En primer lugar, María Garzón, socia fundadora de iMades Communication y responsable de Marca Personal, Mujer y Liderazgo, conversó con Beatriz Bonete, socióloga e investigadora experta en género y cofundadora de NosotrAs Estudio, bajo el marco 'Espacios seguros en el mundo digital'. 

La socióloga explicó que la violencia que las mujeres sufren en el espacio digital es la misma que en el mundo físico, pero reproducida en nuevos canales: "Ningún espacio per se es seguro para las mujeres". 

Además, Bonete repasó los tipos de violencia de género que se producen en internet. Por una parte, según la experta, están las violencias que son una reproducción de la física con herramientas digitales. Por ejemplo, el control a través de las redes sociales. Pero también aparecen violencias específicas más y menos fáciles de identificar, como la "pornografía de venganza", que sería compartir contenido íntimo para hacer daño a la mujer. 

Después tuvo lugar la mesa redonda 'Problemática invisibilizada', moderada por la periodista Magis Iglesias, y en la que participaron Teresa Peramato, fiscal de la Sala de Violencia sobre la Mujer; Carmen María García, presidenta del Observatorio SOS en Red; y Daniel Moreno, teniente de la Guardia Civil y jefe del EMUME Central (Equipo Mujer Menor). 

El teniente Moreno explicó cómo actúa la Guardia Civil cuando una mujer les solicita ayuda, recordando que desde que los agentes entran en la academia reciben formación en violencia de género.

"Cuando una mujer acude a un cuartel, se contacta a la persona especializada en ese ámbito para que pueda acudir a dar respuesta a la mujer que lo necesita". Hoy, España cuenta con 635 agentes especializados de la Guardia Civil en equipos VioGén y 730 en equipos EMUMEs.

Por su parte, Carmen María García comentó que desde el Observatorio cuentan con un protocolo para apoyar a las mujeres y acompañarlas a denunciar ante las autoridades. "Nosotros desde SOS en RED reivindicamos que así como mantenemos el contacto con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, queremos un mayor contacto con fiscalía y la administración central, porque estamos en la calle, vemos la realidad, vemos mujeres que no saben denunciar o no se atreven".

La fiscal Teresa Peramato subrayó que el procedimiento penal en casos de violencia de género siempre es un calvario para la mujer "porque afecta a los bienes más intrínsecos", además implica reproducir las vivencias a las que ha sido sometida.

También repasó algunos casos de violencia de género digital desde el punto de vista jurídico y cómo ha ido evolucionando la legislación. Ahora bien, considera que para hacerle frente desde la judicatura aún son necesarias normas que incluyan determinadas conductas como delito en el Código Penal. Pero también normas que permitan proteger a las víctimas durante el procedimiento.

Tras el debate, Sindy Takanashi, comunicadora contra las violencias machistas y presentadora del podcast 'Queridas Hermanas', y María Rubio "Miare", creadora de contenido digital y directora de contenido, ofrecieron sus propios testimonios. 

Ambas hablaron de la situación de las creadoras de contenido, apuntando que las expectativas sobre las mujeres son mucho mayores, y también explicaron cómo se ejerce la violencia digital en redes sociales y en los nuevos canales de comunicación. 

Finalmente, Salvador Samper, presidente del Observatorio Español de Delitos Informáticos (OEDI) compartió los resultados del 'Estudio y análisis científico sobre la violencia de género digital'. 

"La mayoría de mujeres que se ven inmersas en este tipo de casos se ven afectadas de forma desproporcionada, ya que incluye daños o sufrimiento de índole física, mental o sexual, ciberamenazas, coacciones y otras formas de privación de libertad digital realizadas a través de las nuevas tecnologías, redes sociales y otras plataformas en relación de forma sostenida en el tiempo, con la única finalidad de dominación e intromisión sin consentimiento a su privacidad como forma de control", dijo. 

La conclusión del estudio es que resulta imprescindible que la sociedad tenga conocimiento de lo que está ocurriendo, disponga de la información necesaria y se eduque al personal técnico en las administraciones y tejido social en detectar cualquier caso de ciberviolencia en internet, redes sociales y dispositivos tecnológicos. También que las víctimas tengan acceso a servicios multidisciplinares que combinen personal psicosocial y de informática forense.