Defensa celebra 35 años de la mujer en las Fuerzas Armadas: "Ahora llevamos con orgullo el uniforme de los tres Ejércitos"

"En este acto ponemos en valor el trabajo de las pioneras que 35 años atrás empezaron a romper brechas para servir a los demás, y también el de las que lo siguen haciendo hoy. Tenemos unas Fuerzas Armadas modernas que son un orgullo en la comunidad internacional. Y necesitamos más mujeres, porque sin ellas no habrá paz". Con este mensaje, la ministra de Defensa, Margarita Robles, inauguró en la tarde del 10 de octubre el acto que conmemora el 35 aniversario de la incorporación femenina a las Fuerzas Armadas.

[Un nuevo hito femenino: la coronel Loreto Gutiérrez, cuarta mujer general de las Fuerzas Armadas]

El evento, celebrado en el auditorio de la Galería de las Colecciones Reales (Madrid), ha puesto en valor el papel de las militares como referentes capaces de inspirar a las nuevas generaciones, además de destacar su contribución activa a la resolución de conflictos y el mantenimiento de la paz tanto dentro como fuera de las fronteras nacionales.

Un acto que rememora a las 27 primeras profesionales en incorporarse a las academias militares en 1988—, pero que también actúa como invitación para aquellas jóvenes que "deseen formar parte de esta gran familia" en la que "queremos seguir incentivando ese papel que Naciones Unidas reclama para las mujeres" en el ámbito militar, así como en el resto de sectores de la sociedad.

La ministra de Defensa, Margarita Robles, inaugurando el acto. Cedida

La ministra de Defensa, Margarita Robles, comenzó su discurso recordando la situación "inaceptable" que viven las mujeres de Afganistán, de Ucrania, de Líbano y de otros países en desarrollo, en los que "ver a mujeres con uniforme es esencial" y una vía más para impulsar el cambio a escala global desde las Fuerzas Armadas. 

El acto ha contado con la celebración de dos mesas redondas —una internacional y otra formada por profesionales españolas, entre las que se incluían jóvenes recién iniciadas en la carrera militar. Además, ambas han servido como puntos de encuentro entre militares destacadas en operaciones en el exterior. También se ha interpretado un tema musical a cargo del cuarteto perteneciente a la Unidad de Música del Inmemorial del Rey.

A todas estas profesionales las acompañaron, como asistentes, el jefe de Estado Mayor de la Defensa, almirante general Teodoro López Calderón; el jefe de Estado Mayor del Ejército de Tierra, general de Ejército Amador Enseñat; el jefe del Ejército del Aire y del Espacio, general del Aire Javier Salto y la presidenta de Patrimonio Nacional, Ana de la Cueva, entre otras autoridades civiles y militares.

Fotografía grupal en el auditorio de la Galería de las Colecciones Reales. Cedida

Mujeres, paz y seguridad

Para hablar de la agenda nacida de la resolución 1325 de Naciones Unidas, se ha celebrado un panel internacional moderado por el director general de Personal, el general de división José Ramón Velón. En el coloquio han participado Stella Ronner-Grubacic, embajadora de la UE para Género y Diversidad; Irene Fellin, representante especial del secretario general de la OTAN para Mujeres, Paz y Diversidad, y Wendy Drukier, embajadora de Canadá en España y Andorra.

Las ponentes apuntaron al liderazgo femenino como la mejor vía para ganar terreno, y celebraron hitos como el conseguido en la cumbre de Madrid de 2022, en la que se consiguió por primera vez que la agenda Mujeres, Paz y Seguridad se integrara dentro del argumentario de la Alianza.

Mesa redonda sobre 'El papel de las mujeres en la resolución de conflictos y el mantenimiento de la paz'. Cedida Ministerio de Defensa

En el otro panel, un grupo de seis españolas oficiales, suboficiales y alumnas compartieron testimonios, reflexiones y la vocación que las une en la carrera militar en una mesa que puso en valor el sentido de familia que se vive en la milicia. Elena Carretero, Amanda García, Dolores Martínez, María Soledad Agea, Alba Villarubia y María del Mar Vidal fueron las protagonistas del coloquio. A la primera y a la última las separan más de veinte años de trayectoria profesional, pero su intención de seguir creciendo "como personas y como militares" no distingue de rangos.

"Los valores que se inculcan hacen del Ejército una forma de vida que va más allá del uniforme", coincidieron las interlocutoras de la mesa. Y celebraron junto al resto de asistentes "que las Fuerzas Armadas han dado grandes pasos superando, en 35 años y con la implicación de hombres y mujeres, obstáculos que no tenían que ver con nuestra capacitación. Es muy bonito ver cómo avanzamos de la mano de la sociedad y cómo nosotras también formamos parte de este progreso", añadieron.

Fotografía de las ponentes en la mesa nacional. Cedida Ministerio de Defensa

Durante su conversación, las profesionales también se emocionaron al hablar de la oportunidad vital que supone cada operación en el exterior, y recordaron a Idoia Rodríguez, primera mujer militar española fallecida en territorio extranjero —Afganistán— en febrero de 2007.

35 años de inclusión

1988 fue el año en que las Fuerzas Armadas comenzaron a derribar muros para impulsar una Defensa más diversa e igualitaria. Entonces, las mujeres se incorporaron por primera vez a los cuerpos de ingenieros de los Ejércitos, y los ahora denominados cuerpos comunes de las Fuerzas Armadas.

Un año más tarde, con la Ley 17/1989, del Régimen del Personal Militar Profesional, se permitió su acceso a las denominadas armas combatientes, pero solo para oficiales y suboficiales, garantizando su progresión de carrera en condiciones de igualdad. 

Las militares tuvieron que esperar tres años más para poder acceder a la categoría de Tropa y Marinería. Y no fue hasta que entró en vigor la Ley 17/1999 de 18 de mayo, de Régimen del Personal de las FAS, cuando se garantizó la plena equiparación y el acceso total de la mujer a todos los cuerpos, escalas y destinos operativos.

Una militar preparando una aeronave.

Con dicha ley se alcanzó definitivamente la igualdad formal, y el resto de hitos se han sucedido en cadena hasta hoy. Ahora, las Fuerzas Armadas se presumen más inclusivas, pero también más actualizadas y preparadas que nunca. Las militares se involucran activamente en operaciones internacionales, pilotan cazas de combate y se ponen a los mandos de batallones. 

En 2023, son un total de 15.703 mujeres militares las que, a nivel porcentual, representan un 13% del total de los efectivos en todos los cuerpos y escalas de las Fuerzas Armadas. Un dato que invita a convencerse de que el avance, aunque progresivo, está ahí, y es que en poco más de tres décadas la Defensa española ha logrado situarse al mismo nivel de participación femenina que hay en la OTAN, tal como confirma el último informe de 2020.

El acto en conmemoración de los 35 años de la mujer en el Ejército llega dos meses después del nombramiento, el pasado 22 de agosto, de la coronel Loreto Gutiérrez como la cuarta mujer general de las Fuerzas Armadas. A ella también se suman en el generalato María Teresa Gordillo, Patricia Ortega García y Begoña Aramendía.

Fotografía tomada durante el acto. Cedida Ministerio de Defensa

Esta última, como moderadora del coloquio nacional, puso en valor "las virtudes militares, como el compañerismo, la entrega y la disciplina", que "se mantienen inalterables ante el paso del tiempo, y es una misión que atañe a hombres y mujeres garantizar que sigan permaneciendo así".

La subsecretaria de Defensa, Adoración Mateos, puso el broche final al acto conmemorativo. "Gracias a la labor de todos los agentes implicados en la integración de la mujer, hoy podemos decir que contamos con un modelo de Fuerzas Armadas en el que el porcentaje de mujeres militares está en la media del resto de países, pero con la diferencia de que lo hemos conseguido en la mitad de tiempo", celebró.

Mateos también destacó la labor del Ministerio de Defensa para lograr "que esa igualdad que ya estaba en papel se haya acabado convirtiendo en una efectiva y consolidada como lo está hoy".