De la caída del cabello a la sequedad de la piel, el otoño plantea numerosos retos de belleza y salud. Uno de los recurrentes es que atañe a las manos y los pies, estas zonas especialmente delicadas que sufren roces constantes.
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"Con la reducción de la intensidad del sol, el frío, los contrastes térmicos y la sequedad propia del otoño, nuestra piel se reseca y se escama con mucha facilidad.
Como consecuencia de estos factores ambientales, las células de la piel reciben menos nutrientes, retrasando el recambio celular y produciéndose una acumulación de células muertas. Estas impiden que la secreción sebácea llegue a la superficie, y por tanto previene el proceso de nutrición de la epidermis. Obteniendo como resultado una piel tirante, seca y más sensible, que agrava las molestias propias de la dermatitis atópica" recuerda la firma Belif.
De ahí la importancia de apostar por cremas que además de hidratar, protejan y puedan cubrir todas las necesidades de la piel, especialmente sensible. "En ocasiones, la textura rica que tienen algunos productos de cosmética puede resultar demasiado densa, sobre todo en ciertas partes de nuestro cuerpo como son las manos" recuerda Dove.
¿Por qué ingredientes apostar?
La manteca de karité es habitualmente utilizada. Como fuente vegetal, extraída del árbol de karité, tiene propiedades suavizantes. La lecha de almendra es asimismo muy recomendada por su alto contenido en vitaminas, esencialmente E, y minerales.
Atenta a la glicerina, "un ingrediente natural que se deriva de fuentes vegetales pero que puede fabricarse en un laboratorio, puede ser tanto natural como sintética. Sus fuentes naturales incluyen aceites como el de coco o más comúnmente soja. La glicerina es eficaz sobre todo en productos que la combinan con emolientes, aceites y lípidos, como ocurre en muchas cremas hidratantes" aclara Esperanza Sáenz, responsable de imagen de la firma sevillana Nezeni Cosmetics.
Finalmente, ten en cuenta el aceite de oliva cuyos polifenoles antioxidantes son grandes aliados para luchar contra el envejecimiento de la piel.
El cuidado, también por dentro
Recuerda que la dieta también juega un papel preponderante en el cuidado y, por ende, el aspecto de la piel. "La piel requiere de elasticidad, que también se obtiene de una correcta alimentación en la que no deben faltar ácidos grasos como el aceite de oliva virgen extra, los frutos secos, el aguacate, el salmón u otros pescados azules. También frutas y verduras por su aporte en vitaminas y minerales como el zinc, clave para la salud de nuestros pies, y sobre todo mucha agua" precisa Le Clan.
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