Tania Llasera desfila para Duyos: "No somos adornos. Nuestros cuerpos están para disfrutar la vida"
- El diseñador madrileño presentó su colección otoño-invierno en el archipiélago canario al que rinde homenaje con su propuesta.
- Más información: Un homenaje a la tierra, diseños estructurados y oficios artesanales: las claves de la segunda jornada de la MBFWM
El pasado mes de febrero, en el marco de la Mercedes-Benz Fashion Week, Juan Duyos presentó su colección islas Canarias otoño-invierno 2024-2025, en homenaje al archipiélago. Este 25 de octubre, volvió a presentarla en el evento Arona More than Fashion, en un lugar altamente simbólico: la Pirámide de Arona en Tenerife.
Las islas tienen un sentido especial para el diseñador. "Son españolas, pero están casi en África. Entonces su clima, el entorno e incluso la comida… todo cambia mucho. Son islas volcánicas, es una parte muy especial de nuestro país", nos contó, unos días antes de la presentación.
El desfile se presentó, por ende, como un ejercicio cargado de energía y una inspiración arraigada en el apasionante viaja del diseñador a las islas. Con esta propuesta, Duyos dio vida a una colección que refleja la riqueza sensorial de los paisajes locales y los oficios históricos de su gente. Aporta carácter a las piezas en un vínculo al pasado, pero con proyección al futuro, con autenticidad y orgullo.
"Me hacía muchísima ilusión presentar la colección en Canarias, sobre todo porque es refrescante y es su sitio, su tierra. Volvimos a vernos las caras con los artesanos con los que preparamos la colección. Con cada uno, hicimos una pieza", nos confesó Duyos.
Se presenta, en efecto, como un tributo a la artesanía canaria. El modisto quiso dar visibilidad a los oficios históricos de su gente: el arete canario de Juan Gil (Tenerife), el arte del calado de Candela, Adela, Tita y Esperancita (Gran Canaria), la piel de Titane Ide (La Gomera), las rosetas de Antonio Betancor (Lanzarote), los tejidos de seda de Carmen Díaz (La Palma), las lanas de Beatriz Ballester (El Hierro) o el macramé y el crochet de Melisa Herrero (Fuerteventura).
Para el diseñador, "hay que concienciar a la gente de que la artesanía es el auténtico lujo. Por suerte, se está empezando a percatar de eso. En cuanto al relevo como tal, casi todas las personas con las que trabajo son gente joven. Cuando piensas en un artesano, se te ocurre un señor o una señora mayor, en su pueblo. Pero hay relevo en este sentido, son artistas que tienen otra manera de entender lo artesano. Antes se hacía por necesidad, ahora, por arte".
Duyos tiene claro que este trabajo artesanal, nunca podrá sustituirse por la IA: "La inteligencia artificial está ahí. Posiblemente, la usaremos, pero jamás va una máquina a tomar la conciencia que tomo yo cuando una mujer entra en mi estudio. Mi oficio es el taller, la mano, la costura y lo lento. Hacerse esperar también es muy bonito. El formato 'lo veo, lo compro' está muy bien, pero nosotros vamos por otro camino".
A nivel estético, las salvajes texturas de las islas y los paisajes íntimos quedan plasmados en diseños de jaquares de seda metalizados, estampados líquidos, flecos en rocalla, lamé oceánico o seda.
A ellos se une un paraíso de tonalidades minerales y colores volcánicos como el negro magma, el cobrizo, el hierro rosado, el azul nocturno, el oro o el verde laurisilva que tintan los diseños y recuerdan las islas, desde dentro. En definitiva, una superposición de prendas longilíneas, estructura poderosa, cóctel de tejidos y texturas que evocan la experiencia sensorial vivida en el archipiélago según la visión de Duyos, basada en la costura de factura artesanal.
Hace, asimismo, eco a la trayectoria del modisto, quien ideó numerosas líneas inspiradas en la naturaleza: "Siempre digo que si a alguien no le gusta el sentido del humor ni el mundo natural, algo va mal. Para mí, la de cualquier entorno es muy inspiradora. Soy de Madrid y vivo en ciudad, pero en cuanto salgo o respiro en cualquier país del mundo o en nuestra tierra española, encuentro mucha paz".
Participar en Arona More than Fashion supuso también para Juan Duyos una oportunidad de presentar la colección en la plataforma de moda más grande de la isla de Tenerife y celebrar la variedad de la moda española que, tal y como recuerda el modisto, no saca tanto pecho como debería.
"No hemos sabido vendernos bien, a diferencia del sector de la cocina. Siempre hubo mucho complejo. La moda española es muy joven, tenemos muy poco recorrido. Por lo tanto, nos falta ese reconocimiento, primero, nuestro y luego, a nivel mundial. Es precioso mostrar nuestras propias raíces, no hay que compararse con los franceses o los americanos. Nosotros también tenemos mucha historia", según recordó.
El diseñador, con una dilatada experiencia, nunca ha dejado de sorprender, sin jamás renunciar a su personalidad. Para él, el secreto del éxito es clave: "No es cuestión de reinventarse, es mantenerse. Como nunca he tenido un plan B… el éxito consiste en trabajar en lo que te gusta, ser coherente y estar tranquilo con tu trabajo. Se trata de presentar las colecciones con el estómago".
Tania Llasera, de protagonista
Para esta puesta de largo, en una de las islas que inspiró a esta colección, el diseñador pudo contar con la presencia de Tania Llasera. Fue la primera vez que la comunicadora y presentadora de televisión se subió a la pasarela y, para ello, lució un abrigo negro con detalles en cobre, que fue el look de apertura de su desfile en Madrid.
La colaboración surgió naturalmente: "Juan me mandó un audio para decirme que mi nombre había sido el primero que se le había ocurrido para abrir la pasarela. Me faltó tiempo para decirle que sí, porque, este año, estoy intentando salir de mi zona de confort y hacer cosas que no he hecho nunca. Creo que llega una edad en la que las mujeres, nos autolimitamos y decimos que no por vergüenza o por miedo. Y estoy harta, quiero demostrar que no por tener una edad o un físico, se debe dejar de probar".
Ambos coincidieron en que era el momento perfecto para lanzar un mensaje: "Tania y yo somos amigos desde hace un porrón de años. Cuando hicimos la prueba de vestuario, recordamos un momento fuerte… Tania cogió kilos, apareció por primera vez en mi desfile con este cambio físico. Fue una locura, solamente porque la chica había engordado. Por lo tanto, nos parecía muy gracioso y bonito cerrar el círculo con este desfile, por lo que significa", nos contó el diseñador.
La presentadora también rememoró este momento: "Viví este desfile como una oportunidad que me regalaba a mí misma de cerrarlo. Porque hace muchos años, fui con unos kilitos a una presentación de Duyos y explotó el 'Tania Llasera, irreconocible en el desfile'. Para mí, significa un paso adelante demostrando que las mujeres rotundas tenemos cabida también en todo tipo de sitios y que la belleza no tiene una talla".
En este sentido, Duyos reconoció que durante años, no era una opción evidente: "Era un formato que nosotros pensábamos que era el indicado. Una chica joven, con una talla muy pequeña y una actitud cool… y no es así. Creas para todo el mundo. En mi caso, lo llevo reivindicando desde hace un montón de años. Llevo tiempo pensando que la ropa no solamente le queda bien a una modelo".
Y según la presentadora, la meta aún no se ha alcanzado: "Creo que queda mucho camino por recorrer. Por eso soy tan pesada con el tema del cuerpo. No porque a mí me apetezca seguir hablando de ello, sino porque veo que incluso, a veces, retrocedemos. La salud debería de ser ante todo insignia de belleza. Tener buena actitud y un cuerpo que te acompaña, es lo que debería significar ser bella. No tiene nada que ver con una talla. Es muy cansado que a las mujeres se nos venda que nuestras herramientas más poderosas son la belleza y la juventud. Realmente cuando las pierdes, es cuando más tienes que decir. No somos ornamentos. Nuestros cuerpos están para disfrutar la vida".
"Me emociona poder abrir, con paso firme, segura de mí misma, este desfile de Juan Duyos que creo que significa mucho. Es un paso adelante en la dirección correcta", concluyó la presentadora, modelo por un día, con un mensaje cargado de sentido.