"Orgullo para la carrera", "un gran paso": las juristas celebran el nombramiento de la primera mujer al frente del CGPJ

¡Ya era hora! Es un momento histórico, un orgullo para la carrera… son algunas de las primeras impresiones de diversas juristas sobre el nombramiento de Isabel Perelló como presidenta del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial.
No solo será la primera mujer que presida el alto tribunal, sino que representa el consenso en tiempos de polarización. Ojalá su ejemplo se contagie al resto de instituciones y a la sociedad.

De perfil progresista, Isabel Perelló fue propuesta en el último momento por el sector conservador del CGPJ. Ha obtenido 16 votos de 20. Los 10 conservadores y 6 del ala progresista. 

La celebración de su nombramiento es unánime entre las juezas de las principales asociaciones: Asociación Profesional de la Magistratura, Asociación Judicial de Francisco de Vitoria, y Juezas y Jueces por la Democracia, de la que forma parte la misma Isabel Perelló.

Mujeres, minoría en altos cargos

Todas celebran este reconocimiento de la mujer dentro de la carrera judicial, que aun siendo mayoría está infrarrepresentada en los puestos más altos. “La carrera judicial está integrada por 5.416 jueces y magistrados, de los que 3.101 son mujeres, representando un 57,2%. En Madrid y Cataluña ese porcentaje es mayor”, explica Chantal Moll de Alba, directora de Cátedra de Derecho Registral de la Universidad de Barcelona.

Aunque no la conoce, le indican diversos profesionales del Derecho que la nueva presidenta del Tribunal Supremo es “una magistrada muy profesional que actúa con rigor técnico. A nivel personal es muy amable y conciliadora”.

“Isabel lleva 40 años de una carrera impecable”, relata Clara Martínez, primera magistrada de la Sala de lo Militar del Tribunal Supremo. “Tiene una enorme capacidad y solvencia. Es muy curranta y jurídicamente está muy formada. Es una mujer prudente y discreta. Tiene las cualidades para establecer consenso en un Consejo dividido”.

Celebra además su nombramiento porque, como mujer, “cuesta mucho que se reconozca nuestro trabajo. Cuesta mucho llegar y mantenerse”.

“Es maravilloso -añade la titular del Juzgado de Instrucción nº3 de la Audiencia Nacional, María Tardón-. Ya tenemos la primera mujer presidenta del CGPJ. Es un indicio de igualdad. En la carrera judicial formalmente no hay discriminación, pero en los nombramientos discrecionales se suele promover al varón”.

Explica que son varias las causas. Por un lado, a esos cargos se suelen presentar más hombres. A determinada edad tienen más currículum. Mientras la mujer compatibilizaba la carrera con la crianza, ellos han tenido tiempo de ampliar el currículum y hacer más networking, además suelen votarse entre ellos porque hay más camaradería.

Tampoco en muchos de esos nombramientos se ha aplicado la Ley de Igualdad, por la cual ante currículums similares se fomentará el sexo más infrarrepresentado.

"Ojalá cundiera el ejemplo"

La magistrada del Tribunal Constitucional a propuesta del PSOE, María Luisa Balaguer, también cree que la mujer ha sido marginada en la carrera judicial, “ojalá cundiera el ejemplo. La situación fáctica no nos beneficia, pero está mejorando”. Dice que la mujer tiene otra manera de comportarse y que sus votos particulares casi siempre tienen que ver con un tema de género. Le da la enhorabuena a la nueva presidenta y le desea mucha suerte.

María Jesús del Barco, juez decana de Madrid y presidenta de la Asociación Profesional de la Magistratura, celebra la elección y que sea por mayoría de 16 votos de 20: “Ha costado mucho alcanzar el acuerdo. Es importante que los vocales se acostumbren a negociar y a pactar. Isabel Perelló reúne los requisitos y es independiente”.

Desde todos los ámbitos celebran su nombramiento, le digo. “Menuda carga tiene encima, con tantas expectativas –contesta-. Tiene muchísimo trabajo por delante, además de tener que sacar por mayoría cualificada muchísimos nombramientos, va a tener que tomar decisiones vitales para el país y firmeza ante los ataques a los jueces”.

La ministra de Justicia, Pilar Llop, también lo celebra: “Isabel Perelló es una magistrada muy respetada en la carrera judicial, con sobrados méritos, conocimientos y experiencia en el mundo jurídico y, concretamente, en el Tribunal Supremo. Hoy se ha hecho historia con su nombramiento”.

Aprovecha la ministra para felicitar a los vocales del CGPJ por haber logrado ese acuerdo: “Es un nombramiento muy importante. Demuestra que España es un país avanzado que apuesta por las mujeres profesionales en los puestos de toma de decisión. Se democratiza la legislatura saldando una deuda con nosotras, juezas y magistradas. Le deseo un mandato exitoso”.

Cinco años por delante

Mónica García Yzaguirre, magistrada de la sección 3ª de la Audiencia Provincial de Sta. Cruz de Tenerife, miembro de la Sala de Gobierno del Tribunal Superior de Justicia de Canarias y miembro de la Asociación Judicial Francisco de Vitoria, está muy contenta de que se haya elegido a una mujer de reconocido prestigio: “Se ha roto un techo de cristal”.

Uno de los retos a los que se enfrentará la nueva presidenta del CGPJ, según Mónica García, es sacar adelante muchísimos nombramientos tras cinco años de casi parón. Pero se trata de un Consejo muy difícil y dividido (10 conservadores y 10 progresistas) y los nombramientos se tienen que elegir por mayoría cualificada.

“Se tiene que normalizar en este país el consenso, la sensatez y el diálogo. La carrera judicial es un reflejo de la sociedad y los jueces son por lo general gente razonable”, insiste Mónica García. Añade que, además, “hay un colapso de trabajo tremendo, sobre todo en lo Civil, porque se ha generalizado la litigación masiva. Hay que luchar por las mejoras profesionales”.

María Tardón es un ejemplo de la carga que soportan los magistrados. Es titular del Juzgado central de Instrucción nº 3 de la Audiencia Nacional, pero, además, sustituye de forma temporal al juez Manuel García-Castellón que ha pedido adelantar su jubilación. Era titular del Juzgado central de Instrucción nº 6 y también acarreaba la titularidad temporal de otro juzgado. De tal manera que, ahora mismo, María Tardón lleva sobre sus espaldas el trabajo de tres juzgados.

La magistrada Clara Martínez indica que el sistema judicial debe modernizarse, avanzar en temas de tecnología y ayudar a los jueces con la sobrecarga de trabajo, racionalizándolo y aumentando las plazas: “Es un servicio público y el tercer poder del Estado. Debe tener el reconocimiento por parte de la ciudadanía”.

Cruz Sánchez de Lara, abogada y activista, editora de Magas y Enclave ODS, y vicepresidenta de EL ESPAÑOL, concluye con que “la llegada de Isabel Perelló a la presidencia del Consejo General del Poder Judicial supone otro nuevo hito de las mujeres en las instituciones. Nos falta alcanzar el peldaño más alto que es la Presidencia de Gobierno”.