Anticonceptivos en el postparto y la lactancia: las claves para saber cuándo y qué método usar
Hay métodos anticonceptivos perfectamente seguros durante la lactancia y el postparto, pero es conveniente conocer sus pros y contras para que cada mujer los adapte a sus necesidades.
2 junio, 2021 01:16Noticias relacionadas
El periodo de postparto constituye una situación nueva para la mujer, que obliga a replantear las opciones anticonceptivas y adaptarlas a las circunstancias, siendo un buen momento para asesorar, tanto a pacientes que ya lo usaban previamente, como a aquellas que no lo hacían, teniendo en cuenta que el periodo mínimo recomendado antes de buscar un nuevo embarazo es de 12 meses.
La anticoncepción en este periodo va a depender tanto de los criterios habituales, así como de la lactancia materna. En las mujeres lactantes, la primera ovulación suele producirse alrededor de 6 meses tras el parto, pero este periodo es muy variable, y depende, sobre todo, del tiempo de lactancia y del uso de suplementos, en caso de lactancia artificial o mixta (suele tardar más cuanto más exclusiva es la lactancia). De hecho, las pacientes que no realizan lactancia materna exclusiva pueden quedar gestantes incluso antes del retorno de la menstruación.
De forma general, los anticonceptivos hormonales pueden clasificarse dentro de 2 grupos: aquellos de composición hormonal mixta, es decir, estrógenos y gestágenos y otros de composición sólo gestagénica. Ambos tienen alta eficacia anticonceptiva y, en general, no tienen efectos secundarios o bien, son mínimos y bien tolerados. Sin embargo, el uso de anticoncepción hormonal durante la lactancia materna tiene connotaciones especiales ya que, aunque puede utilizarse, no todos los tipos de anticonceptivos están recomendados.
¿Cuáles usar en este periodo?
Métodos solo gestágenos: contienen únicamente un tipo hormonal, los gestágenos, que ejercen su principal efecto anticonceptivo bloqueando la ovulación. No afectan al establecimiento de la lactancia, no alteran la calidad ni la cantidad de la leche materna y no se han observado efectos adversos por la exposición en lactantes siendo, por lo tanto, de elección en este periodo.
Píldora de solo gestágenos o minipíldora (Cerazet®, Azalia®, Nacrez®): puede prescribirse, de forma general, inmediatamente tras el parto. Su uso es oral, diario y su eficacia anticonceptiva comienza a las 48 horas. Eficacia: alta.
Implante (IMPLANON NXT®): se trata de una fina varilla de vinilo, que se coloca en la cara interna del brazo no dominante y que produce una liberación de hormonas continua durante un periodo máximo de 3 años. Puede colocarse de forma inmediata tras el parto. Su forma de inserción es ambulatoria y protege desde 7 días después de su colocación. Se recomienda que la paciente acuda a consulta para una visita de control a los 3 meses y que palpe ocasionalmente la zona del implante para asegurar su localización. Eficacia: muy alta.
Diu hormonal (Mirena®;Kyleena®): se trata de un dispositivo intrauterino que libera de forma continua levonorgestrel durante un periodo máximo de 5 años. Puede colocarse de forma segura dentro de las primeras 24 horas de postparto, o bien pasadas 4 semanas, siempre y cuando no haya sospecha de infección puerperal. También puede utilizarse en pacientes con cesárea. La inserción del dispositivo es ambulatoria y se recomienda realizar un control ecográfico un mes después de la inserción. Eficacia: muy alta.
Estos métodos pueden retirarse cuando la paciente lo desee y la recuperación de la fertilidad es inmediata con todos ellos. Pueden alterar el patrón de sangrado habitual de la paciente, en general, disminuyendo la cantidad y duración menstrual, sin alterar la eficacia del método.
Existen otras opciones anticonceptivas hormonales que pueden usarse de forma segura durante la lactancia, aunque no en el postparto inmediato:
A partir de 6 semanas: Medroxiprogesterona (Depo-progevera®): es un método sólo progesterona, con el mismo funcionamiento, sin embargo, por su formulación especial no se recomienda su uso durante las primeras semanas ya que existe riesgo de exposición del neonato a los esteroides. La recuperación de la fertilidad tras su suspensión es más lenta, puede tardar hasta 6 meses. Su administración es intramuscular cada 3 meses. Eficacia: alta.
A partir de 6 meses: Anticonceptivos hormonales combinados (oral, vaginal o parches). No se recomienda su uso antes de los 6 meses ya que aumentan el riesgo de trombosis durante las primeras semanas de postparto y pueden disminuir la cantidad de leche materna. Eficacia: alta. La recuperación de la fertilidad es inmediata tras la suspensión.
Anticoncepción de urgencia ("píldora del día después") y lactancia:
Levonorgestrel 1500 μg (Norlevo ®, Postinor ®) su uso es seguro durante la lactancia. Es útil hasta un máximo de 72 horas tras relaciones sexuales de riesgo, aunque disminuye su efectividad conforme pasa el tiempo.
Los requerimientos para la prescripción de los anticonceptivos hormonales son sencillos, siendo suficiente con una historia clínica detallada y exploración física básica.
*La doctora Olga Redrado es ginecóloga en la Unidad de la Mujer del Hospital Quirónsalud Zaragoza.