10 pasos para un buen detox y la receta del jugo verde clave: así limpiará tu hígado y mejorarás la salud integral
Permite que tu cuerpo se depure de toxinas siguiendo estos hábitos saludables y fáciles.
8 junio, 2024 02:02Está llegando el verano, no cabe duda. Y junto con el verano se reavivan preocupaciones que tienen más que ver con nuestro autoconcepto que con el estilo de vida. Sin embargo, esas preocupaciones (más allá de cuándo aparezcan) deberían estar todo el año:
¿Me estoy cuidando? ¿Tengo buenas digestiones? ¿Por qué me siento tan pesada?
Si te haces alguna de estas preguntas, es desde luego un buen punto de partida porque implica un nivel de consciencia ("sé que tengo un problema") donde lo ideal es pasar a la acción.
Pero amiga, ahí es donde suele aparecer uno de los primeros contras, no sabemos por dónde empezar, y es entonces cuando atacan las dietas relámpago, los planes estrictos y miles de recursos que prometen resolverte la vida desde ya y para siempre.
Bueno, yo no vengo con una dieta hipocalórica, lo que te quiero contar es por qué hacer un detox puede ser bueno para ti y cómo deberías hacerlo.
¿Qué vas a limpiar?
Dejemos claro ante todo que un detox no tiene por qué consistir en adelgazar. Es un proceso de limpieza. Cuando pensamos en una dieta detox, imaginamos una escoba que va barriendo todas las esquinas de nuestro cuerpo. En cierto modo, eso es lo que sucederá, pero solo será posible si nuestro principal foco es el hígado.
Este órgano tiene funciones clave en nuestro organismo, es el colador esencial que cuando está obstruido o sobrecargado, deja toxinas dentro del cuerpo que tarde o temprano dan problemas.
Además, en el caso de las mujeres, cuando hay un hígado sobrecargado no se produce una correcta eliminación de los estrógenos que cada mes fabricamos. Esto implica una sobrecarga hormonal que a corto plazo producirá reglas dolorosas, síndrome premenstrual, cambios de humor… y a largo plazo aumentará las probabilidades de tener algún cáncer hormonal.
10 pasos detox
“Vale Cris, lo he entendido, empezaré por el hígado. Pero, ¿cómo lo hago?”
A este punto quería llegar para empezar a compartirte las claves esenciales para hacer un buen detox.
1. Haz pocas comidas. Tradicionalmente (hasta hace unos 10 años aproximadamente) se recomendaban unas 5 o 6 ingestas al día. Esta estrategia tenía una visión pesocentrista, basada en mantenerte entretenida comiendo todo el día pequeñas cantidades. Sin embargo, se han demostrado los efectos perjudiciales que esto tiene en nuestro organismo. Y es que dentro de nuestro aparato digestivo hay un sistema llamado sistema motor migratorio que se encarga de hacer un barrido “rapidito” cuando hemos terminado de hacer la digestión. Hasta que esta aspiradora entra en acción pasarán aproximadamente unos 90 minutos. Y necesitará unas 2 horas para hacer su trabajo. Así que si los cálculos no me fallan, deben pasar aproximadamente 3 horas y media entre una ingesta y otra para que esta pre-limpieza sea completa.
2. Incorpora el ayuno intermitente. Aumentando las horas de ayuno y consiguiendo espaciar la cena y el desayuno entre 12 y 16 horas, conseguirás que la limpieza de la que hablábamos en el punto anterior sea más profunda.
3. Deja de consumir líquidos que no sean agua. Tendemos a hidratarnos con miles de líquidos calóricos que activan nuestra digestión, nos sobrecargan a nivel digestivo y (lo que es peor aún) no nos nutren. El café con leche, el refresco, la cervecita del aperitivo, el vino de la comida… Así pasamos el día y cuando queremos darnos cuenta, ha pasado el día y hemos ingerido 1 litro y medio de líquido de los cuales 200ml eran agua y el resto procesados.
Nuestro cuerpo está preparado para hidratarse con agua, no con zumos. Así que no te lo pienses y prioriza ese líquido transparente con fama de aburrido antes que cualquier otra cosa.
4. Agrega infusiones depurativas. Mis favoritas son la bardana, el diente de león y la alcachofera. No, buenas no están. Y no, no les puedes añadir edulcorantes. Pero con una rodaja de limón (sin piel) serán más fáciles de tomar y notarás el efecto depurativo y la sensación de ligereza que te aportan.
5. Elimina antiinflamatorios, protectores estomacales y cualquier medicamento (siempre que no haya prescripción médica). La mayoría de medicamentos tienen efectos nocivos en nuestro hígado. Y aunque la medicina salva vidas, nos hemos acostumbrado a medicarnos en exceso y a introducir herramientas muy fuertes cuando con técnicas naturales podríamos paliarlo. Por eso, si eres de las que desayuna un antiinflamatorio por la mañana… déjalo.
6. Introduce un puñado de hoja verde al inicio de todas tus comidas (sí, por la mañana también). Las hojas verdes tienen una gran cantidad de clorofila y esta tiene un poder depurativo descomunal. ¿Qué son hojas verdes? Principalmente la rúcula, los canónigos y las espinacas son las que más te favorecerán, tus digestiones mejorarán, los ardores se reducirán e irás mejor al baño.
7. Duerme 8 horas. Sí amiga, el descanso es esencial. No basta con hacer un ayuno, sino que el cuerpo en reposo consigue hacer procesos de limpieza que no somos conscientes. De hecho, muchos de los casos de insomnio que vemos en consulta están causados por un hígado sobrecargado.
¡Ah! Y este proceso de limpieza nocturno no es solo a nivel digestivo, sino que nuestro sistema inmunitario y nervioso hace un barrido brutal cada noche mientras dormimos en el cuerpo y en el cerebro.
8. Aumenta la actividad física a mínimo 3 días a la semana. Nuestro sistema inmunitario tiene como pilar fundamental los ganglios linfáticos, unos centros de limpieza y de detección de problemas situados en puntos estratégicos del cuerpo. Estos funcionan con un líquido llamado linfa, y la linfa no tiene un corazón que la impulse y la mueva por el cuerpo. Sí, lo has adivinado, la única forma de mover la linfa es moviéndote tú. Por eso, y por miles de razones más, es esencial que practiques actividad física combinada (fuerza y cardio) mínimo 3 días a la semana. Y no, esto no forma parte de un plan detox, sino de la vida misma.
9. Elimina cualquier ultraprocesado, azúcar o alcohol. Aunque parezca obvio, nuestro cuerpo no puede limpiarse si ingerimos estas sustancias que "ensucian" el sistema. Entra cualquier tipo de ultraprocesado, frito, azúcar o edulcorante y bebida alcohólica (no, la cerveza sin alcohol tampoco).
10. Agrega este zumo detox todas tus mañanas junto con el desayuno. Este zumo lo recomiendo en consulta habitualmente y he comprobado como al tomarlo durante dos semanas notas como tus digestiones son de mejor calidad, te sentirás mucho más ligera y favorecerás ese gran deseado efecto detox.
Juego verde: la receta
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1 manzana con piel
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½ pepino
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1 rama de apio
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1 puñado de hojas verdes tipo espinaca
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1 cm jengibre sin piel
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1 cucharita de polen
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½ cucharita cúrcuma
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1 pizca de pimienta
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lascas o bebida vegetal de coco sin azúcar
Por último, recuerda que no hay trucos mágicos para perder peso, que la base siempre está en los hábitos y que los procesos detox no deberían utilizarse como un break entre desfase y desfase, sino como una ayuda para hacer de tu organismo uno más saludable.