Desde el pasado mes de septiembre, se han ahogado más de 340 menores en el Mediterráneo oriental, muchos de ellos bebés y niños pequeños. Es la denuncia de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) y el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), que alertan de que "el número de muertes está aumentando".
Además, recuerdan que el número de fallecidos puede ser mayor, por aquellos cuerpos que se pierden en el mar. Estos organismos indican que los niños conforman el 36% del total de personas en tránsito, por lo que "la posibilidad de que se ahoguen en el mar Egeo cuando cruzan de Turquía a Grecia ha aumentado proporcionalmente".
En las primeras seis semanas de 2016 se han ahogado 410 personas de las 80.000 que cruzaban el Mediterráneo oriental. La cifra se ha multiplicado por 35 en relación al año anterior, subrayan en un comunicado.
“Puede que ahora no tengamos la capacidad para poner fin a la desesperación que obliga a tanta gente a intentar cruzar el mar, pero los países pueden y deben cooperar para conseguir que esos viajes tan peligrosos sean más seguros. Nadie pondría a un niño en un barco si existiera otra opción más segura”, ha destacado Anthony Lake, director ejecutivo de UNICEF.
El estrecho del mar Egeo, entre Turquía y Grecia, es "una de las rutas más mortíferas del mundo para refugiados y migrantes", aseguran los tres organismos. Detallan que la mala mar del invierno, la sobrecarga de las embarcaciones y la mala calidad de éstas y de los salvavidas aumentan el riesgo de naufragio, lo que hace que el viaje sea "significativamente más peligroso".
“Necesitamos realizar más esfuerzos para combatir el contrabando y el tráfico. Además, como muchos de los niños y adultos que han fallecido intentaban reunirse con sus familiares en Europa, si queremos reducir el número de muertes, la prioridad absoluta debe ser organizar maneras de que las personas viajen legalmente y de manera segura, por ejemplo a través de programas de reasentamiento y reunificación familiar”, ha pedido Filippo Grandi, Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados.
El comunicado llega mientras en Bruselas se reúnen los Veintiocho sin haber tomado nuevas decisiones al respecto. El Secretario General de la ONU ha convocado una reunión de alto nivel para el 30 de marzo en Ginebra, para establecer los cauces de admisión de los refugiados sirios en todo el mundo.