Venezuela ha celebrado este domingo elecciones municipales para elegir a 2.500 consejeros, unos comicios marcados por el desánimo y la desconfianza de un sector de la oposición que no ha acudido a las urnas. En Caracas y otras ciudades del país, muchos centros de votación han aparecido casi vacíos.
Venezuela se encuentra en su quinto año de recesión, que ha reducido a la mitad el tamaño de la economía y ha obligado a emigrar a 3 millones de personas para escapar de la hiperinflación y el crimen rampante. Por lo que en Caracas los electores están más preocupados por la crisis que atraviesa la nación con las mayores reservas de petróleo en el planeta, y que ha disuelto el poder de compra de la ciudadanía, que por conocer siquiera la oferta que encontrarán en las tarjetas electorales.
En el centro de votación Escuela Josefa Victoriana Riera en la árida ciudad del noroeste de Punto Fijo, solo 366 personas habían votado al mediodía de los 2.510 votantes registrados, y una proporción similar se observó en otros lugares.
A este respecto, el presidente venezolano, Nicolás Maduro, ha explicado que ese sector de la oposición que no acudió a las elecciones municipales apuesta por la "aventura golpista" y está a la espera de una "invasión" extranjera para "llegar al poder".
"Una parte de la oposición apuesta al voto, pero otra parte apuesta a la aventura golpista y está esperando que llegue del norte un golpe de Estado, una invasión para ellos llegar al poder", ha dicho Maduro a los periodistas después de votar en un centro electoral del oeste de Caracas.
Por su parte, el legislador opositor Francisco Betancourt en la ciudad de Barinas, ha afirmado que la razón del desánimo es que "la gente no tiene motivación. La crisis es una paliza todos los días".
"Una farsa de Maduro"
Los principales partidos políticos opositores como Primero Justicia -del dos veces candidato a la Presidencia Henrique Capriles- así como Voluntad Popular, del líder preso Leopoldo López, no han acudido a las elecciones pues, aseguran, constituyen una "farsa" del Gobierno de Nicolás Maduro.
Estas organizaciones, al igual que Acción Democrática y Un Nuevo Tiempo, se encuentran inhabilitadas por no haber participado en los comicios presidenciales del 20 de mayo pasado, que el presidente Nicolas Maduro ganó en una votación considerada como un fraude por parte de Estados Unidos, la Unión Europea y la mayoría de las demás naciones latinoamericanas. Maduro, sin embargo, dice que es víctima de un complot dirigido por los Estados Unidos para obligarlo a abandonar el poder y culpa a la crisis de las sanciones impuestas por Washington a su gobierno.
El dirigente opositor Andrés Velásquez auguró este sábado poca participación de los electores en las municipales como una "contundente demostración de desprecio y rechazo" frente a lo que consideró una "inútil y fraudulenta" elección.
"En Venezuela, con este CNE, el voto perdió su efectividad", añadió al recordar una petición que ha hecho el antichavismo al menos desde 2014: designar nuevos rectores del poder electoral.
El chavismo, solo ante las urnas
El jefe del comando de campaña del chavismo, Julio León Heredia, criticó en una rueda de prensa televisada la decisión de los opositores de no participar en las elecciones, cuando el país "va a ser el epicentro del mundo".
Además, dijo que la plataforma oficialista, que lidera el gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv), está lista para desplegarse desde las 4.00 horas locales (8.00 GMT) con su acostumbrado "toque de diana", un sonido que marca el llamado a las urnas para los simpatizantes del chavismo. Indicó que ha sido baja la participación histórica del electorado en este tipo de comicios, pero que confía en que el pueblo "va a responder el domingo" con el voto.
Estas elecciones se presentan en medio de la grave crisis económica que padece Venezuela, y que se expresa en escasez generalizada, hiperinflación y una pésima prestación de los servicios públicos. Esta situación llevó el pasado viernes a los obispos del país a pedir a los electores que sufraguen sin "sentimentalismos", sino "acorde a la realidad que se ve".
Inicio de mandato
El próximo 10 de enero, Nicolás Maduro asumirá un nuevo mandato presidencial fruto de las pasadas elecciones del mes de mayo. En este sentido, la vicepresidenta de la Subcomisión de Derechos Humanos del Parlamento Europeo, Beatriz Becerra, envió una carta a la alta representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Federica Mogherini, en la que pedía acordar con los ministros de Asuntos Exteriores la posición común de la UE en el caso Venezuela.
En concreto, Becerra exigía no reconocer el nuevo mandato de Maduro a partir del 11 de enero, amparándose en la constatación de fraude en las pasadas elecciones presidenciales. De esa forma, dijo, Maduro “ya solo se representará a sí mismo y a su corte narco-corrupta”.