Mientras los dirigentes rusos siguen apostados en garantizar que el país no tiene planes de invadir Ucrania, y las acciones diplomáticas se suceden para desescalar la tensión en la zona, la Flota del Mar Negro de la Armada Rusa comenzó este jueves ejercicios navales tácticos en esas aguas en los que participarán también buques de las flotas del Norte y del Báltico. Todo ello en medio de las tensiones con Ucrania, que se ve amenazada por el incremento de las actividades militares rusas.
Según un comunicado del servicio de prensa de la entidad castrense citado por Interfax se trata de "maniobras planificadas" que practicarán el trabajo conjunto de grupos navales mixtos en la región del Mar Negro, en marco de los mayores ejercicios navales rusos desde la desaparición de la Unión Soviética.
El comandante en jefe de la Armada rusa, Nikolái Yevménov, dijo el pasado día 4 que estas maniobras, en las que en total participarán más de 140 buques y casi 10.000 soldados, tendrán lugar tanto en aguas territoriales como internacionales, desde el Mediterráneo, los mares del Norte y Ojotsk, hasta el Océano Pacífico y la parte nororiental del Atlántico.
El inicio de las maniobras en el mar Negro coinciden con el comienzo de los ejercicios militares conjuntos de Rusia y Bielorrusia "Determinación aliada 2022", que se llevan a cabo en territorio bielorruso y el emplazamiento de más de 100.000 soldados en territorios rusos próximos a la frontera ucraniana.
Aunque Ucrania y Occidente han condenado estas acciones, que denuncian como los preparativos para una invasión rusa, Moscú ha defendido su derecho soberano a desplazar sus fuerzas en su propio territorio. En los ejercicios navales participan, además de los buques antiminas de la Flota del Mar Negro "Valentin Pikul" y "Vice Admiral Zajaryin", un destacamento de seis buques de desembarco de la Armada Rusa.
La agrupación naval, integrada por los buques "Koroliov", "Minsk", "Kaliningrad", "Piotr Morgunov", "Georgui Pobedonosets" y "Olenegorski Gorniak" arribó al puerto de Sebastopol, base permanente de la Flota del Mar Negro, ubicado en la península de Crimea, anexionada por Rusia en 2014.
Ante las preocupaciones de Kiev sobre la escalada militar rusa, el jefe del Servicio de Espionaje Exterior (SVR), Serguéi Narishkin, aseguró hoy que Moscú no tiene planes agresivos contra Ucrania y calificó de "peligrosa mentira" las informaciones sobre los supuestos planes de Rusia de invadir Ucrania.